PALMA DE MALLORCA 13 Sep. (EUROPA PRESS) -
El buque 'Don Pedro', la embarcación de la empresa Iscomar que el pasado 11 de julio se hundió frente las costas de Ibiza tras colisionar con un islote, no tenía permiso para transportar residuos peligrosos.
Así lo informó hoy Greenpeace en un comunicado, en el que señala que el transporte de baterías sin declarar que transportaba el 'Don Pedro' vulnera la Directiva 2000/53/CE sobre vehículos al final de su vida útil, que exige a los gobiernos un control estricto del almacenamiento y tratamiento de vehículos.
Greenpeace asegura que a partir de respuesta del Ministerio de Medio Ambiente a una carta de Greenpeace queda confirmado que el 'Don Pedro' "transportaba ilegalmente residuos peligrosos".
El buque, de acuerdo con la información enviada al Ministerio por el director de la Marina Mercante, transportaba 3.016 kilos de baterías de coche agotadas y 12 bidones con sustancias potencialmente peligrosas -no se especifica qué tipo de sustancias son, a pesar de ser muy importante para poder determinar los potenciales impactos y la forma de actuación-.
Las baterías de coches son declaradas residuos peligrosos por la UE, ya que contienen ácido sulfúrico, un compuesto muy corrosivo, y plomo, un metal pesado altamente tóxico. Además, el plomo y sus compuestos son bioacumulativos y persistentes, lo que significa, aclara Greenpeace, que su impacto en el medio ambiente y en la cadena trófica es "muy grave" y que puede tener "graves consecuencias para la salud".
La organización subraya que el hecho de que la embarcación naufragada no tuviera el preceptivo permiso es consecuencia del "descontrol e incumplimiento" de las directivas europeas y confirma, a su juicio, que la gestión de residuos peligrosos en España es "muy deficiente" y tiene consecuencias "muy graves".
"El caso del buque Don Pedro pone de manifiesto el déficit en la gestión de sustancias peligrosas en este país", declaró el director ejecutivo de Greenpeace, Juan López de Uralde, que recordó que la organización presentó el pasado 27 de julio una denuncia contra la empresa Iscomar por ocultar el transporte de residuos peligrosos.
Finalmente, el grupo ecologista indica que no es urgente que se termine de retirar el fuel que aún alberga el buque en sus tanques y que resulta necesario actuar frente los residuos peligrosos que siguen en el fondo del mar.