MADRID, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
La compañía de investigadores privados Grupo Winterman aseguró hoy que existen profesionales dedicados a provocar fuegos que cobran hasta 70.000 euros por provocar un incendio, para beneficio de empresarios que buscan cobrar la recompensa de pólizas de seguros o la reconversión de un terreno.
Según el presidente de la compañía, José Maria Vilamajó, estos mercenarios son contratados por hombres de negocios con problemas económicos: "Los detectives privados, cuando somos contratados generalmente por la compañía de seguros para dictaminar las circunstancias de un fuego, lo primero que hacemos es investigar la viabilidad del negocio siniestrado", explicó.
En este sentido, aseguró que la mayoría de los incendios provocados tienen lugar de noche, en días festivos y en horas intempestivas, y además son muy violentos y de rápida propagación, ya que se en su mayoría se utilizan acelerantes como gasolina o alcohol, apuntó.
Vilamajó apuntó también a otras causas menos comunes, como el deseo de reponer artículos o equipos de una vivienda, o negocios viejos o dañados, liquidar rápidamente un inventario, deshacerse de productos ilegales, reclamar pérdidas de propiedades que no existen, y solicitar reconversiones de terrenos o reconstruir edificios.
Según su experiencia, en verano se producen todos los años incendios industriales de importancia. "Tienen lugar durante las vacaciones estivales con el fin de asegurar el anonimato por la carencia de testigos en la zona y para no tener que reanudar en septiembre una actividad sin futuro", concluyó.
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