Más de 500 personas, muchas de estética antifascista, se manifiestan en Usera para recordar a Carlos Palomino

MADRID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -

Más de 500 personas, muchas de ellas de estética antifascista, se concentraron ayer en la plaza de Julián Marías, en el distrito de Usera, para recordar a Carlos Javier Palomino, el joven de 16 años asesinado en el Metro de Legazpi el pasado domingo a manos de un presunto neonazi, y reclamar que la muerte del joven no quede impune.

Los manifestantes desplegaron una pancarta con el lema 'Carlos. Ni olvido ni perdón' y lanzaron proclamas en contra del fascismo y la xenofobia, en una plaza de Julián Marías fuertemente escoltada por medio centenar de agentes del Cuerpo Nacional de Policía y cuatro 'lecheras'.

Los organizadores de la protesta aprovecharon la convocatoria para repartir pasquines y carteles, con la cara del joven fallecido sobre un fondo negro y blanco, en los que se convoca a una concentración el próximo sábado a las 17.00 horas en la Puerta del Sol.

Precisamente, esta manifestación, al igual que otra de Alianza Popular que partía de la calle de Montera, ha sido prohibida por la Delegación del Gobierno en Madrid ante el temor de que puedan rebrotar enfrentamientos entre jóvenes extremistas.

Entre los asistentes a la concentración, que entonaron cánticos como 'Madrid será la tumba del fascismo' y 'Carlos, hermano, no te olvidamos', se encontraban muchos de los compañeros de Carlos Palomino en el Instituto Tirso de Molina, así como varias decenas de personas que el pasado martes despidieron al joven en el cementerio de la Almudena.

Durante la protesta, los asistentes reclamaron constantemente la ilegalización de partidos como Democracia Nacional, que convocó la manifestación a la que, presuntamente, acudía el asesino de Carlos Palomino. Además, los manifestantes recordaron a Alejandro Martín, el joven que recibió una puñalada en el pulmón en el mismo suceso en el que falleció Carlos Palomino.