ROMA, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Papa Francisco ha pedido que no se permanezca "indiferente" ante la trata de seres humanos en un mensaje enviado a los fieles de Brasil con motivo de la 'Campaña de fraternidad' de Cuaresma que este año se centrará en el tema 'Fraternidad y trata de seres humanos' y que se celebrará bajo el lema 'Cristo nos libertó para que vivamos en libertad'.
"¡No se puede permanecer indiferente sabiendo que hay seres humanos comprados y vendidos como mercancías! Pensemos en los niños adoptados para la extracción de órganos, en las mujeres engañadas y obligadas a prostituirse, en los trabajadores explotados, sin derechos, ni voz. Esta es la trata de seres humanos. En este punto necesitamos un profundo examen de conciencia", ha precisado el Pontífice.
En esta línea, se ha preguntado: "¿Cuántas veces toleramos, de hecho, que un ser humano sea considerado como un objeto, expuesto para vender un producto o para satisfacer deseos inmorales?". Y ha añadido que las personas que "usan y explotan", aunque sea "indirectamente", son "cómplices de esta opresión".
Además, el Pontífice ha precisado que también en el ámbito familiar, se encuentran casos de "padres que esclavizan a sus hijos; hijos que esclavizan a sus padres; cónyuges que se olvidan de su llamada a este don y se explotan como si fueran productos de consumo, desechables; ancianos sin un lugar en la sociedad y niños y adolescentes sin voz".
"¡Cuántas veces la arrogancia reina allí también! ¡Cuántos ataques a los valores básicos del tejido familiar y de la misma convivencia social!", ha exclamado.
Por ello, el Papa invita en estos próximos cuarenta días a hacer "un examen de conciencia" y a movilizarse "contra una plaga social como la trata de seres humanos". "¿Cómo se puede proclamar la alegría de la Pascua , sin ser solidarios con aquellos a los que en esta tierra se niega la libertad?", ha insistido.
Para Francisco, cuando se ofende la dignidad humana de los demás es porque antes se ha "malvendido" la propia "para conseguir poder, fama, bienes materiales". "La dignidad humana --ha recordado el Papa-- es igual para todos los seres humanos. Espero que los cristianos y las personas de buena voluntad se comprometan para que nunca hombre o mujer, jóvenes o niños sean víctimas de la trata de seres humanos". Y la base más eficaz de restaurar la dignidad humana es, según ha precisado, anunciar el Evangelio por todas partes.
