Publicado 25/03/2014 08:38

ACNUR muestra su conmoción por la muerte de 98 refugiados en un naufragio en el lago Alberto


MADRID, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha expresado este lunes su "conmoción y tristeza" por la muerte de alrededor de un centenar de refugiados tras el hundimiento de un barco en el lago Alberto, ubicado en la frontera entre Uganda y República Democrática del Congo (RDC).

"Esta tragedia me ha impactado profundamente", ha dicho el alto comisionado, Antonio Guterres. "Mis pensamientos están con los que han perdido a sus seres queridos y con los supervivientes", ha agregado.

Asimismo, ha expresado su agradecimiento al Gobierno de Uganda y al resto de organismos que han organizado las tareas de rescate y que están apoyando a los supervivientes. "He pedido a la oficina de ACNUR en Uganda que dé pleno apoyo a los esfuerzos de las autoridades para asistir a las víctimas y sus familiares".

Los servicios de rescate han conseguido sacar con vida a 41 personas de las aguas del lago, también conocido como lago Albert Nyanza o lago Mobutu Sese Seko, si bien varias decenas siguen desaparecidas.

La prensa ugandesa ha cifrado en alrededor de 150 el número de personas que viajaban en el mismo, si bien fuentes locales de la provincia de Kivu han dicho que dicho número podría ascender a 300.

ACNUR y el Gobierno ugandés están facilitando además el traslado de los cadáveres de vuelta a RDC. Uganda albergaba a finales de febrero a unos 329.000 refugiados y solicitantes de asilo, y aproximadamente la mitad de ellos son congoleños.

Durante los tres últimos meses, ACNUR ha detectado un aumento en el número de refugiados de RDC que regresan a su país de forma espontánea, muchos de ellos después de vivir dos y tres años en Uganda, a medida que la situación en sus áreas de residencia se va estabilizando y perciben que hay algo más de seguridad.

La provincia de Kivu ha sido foco durante años de los enfrentamientos entre el Ejército y el Movimiento 23 de Marzo (M23), que anunció el noviembre el cese de las hostilidades. Sin embargo, en la zona siguen activas las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR).