GINEBRA, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Oficina del alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) pidió ayer al Gobierno de Colombia que proteja a los indígenas Wayuu del departamento de La Guajira, en el norte de Colombia, que han sido forzados a desplazarse de sus comunidades debido a la violencia desatada en la región.
El portavoz del organismo en Ginebra, Ron Redmond, expresó en rueda de prensa su gran preocupación por los ataques registrados recientemente a manos de hombres armados, que quemaron las aldeas y amenazaron con matar a los líderes Wayuu.
Los indígenas huyeron de la zona y cruzaron la frontera para buscar refugio en la vecina Venezuela. "ACNUR llama a las autoridades a tomar medidas preventivas adecuadas para proteger a los indígenas de la violencia y del desplazamiento forzado", declaró Redmond ante los periodistas.
Según el personal en Venezuela del Alto Comisionado, 86 indígenas Wayuu han ido llegando en las últimas dos semanas al departamento de Zulia, como consecuencia de los enfrentamientos violentos contra sus comunidades. Además, se informa de que un grupo más numeroso aún se encuentra en el desierto de La Guajira en su camino hacia territorio venezolano.
Redmond advirtió de que este tipo de atropellos se repite y no cesa, en un intento por despojar a los indígenas de sus tierras ancestrales y agregó que las agresiones incluyen asesinatos selectivos, extorsión e intimidación, entre otros abusos.
Otros grupos indígenas afectados por la violencia en la región son los Arhuaco, los Kogui y los Wivam, que constituyen el 45 por ciento de la población del departamento colombiano de La Guajira, según informaciones del centro de noticias de la ONU recogidas por Europa Press.