MADRID 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
Cruz Roja Española incrementó el año pasado en un 60% su atención a los refugiados en el país, hasta rebasar la cifra de 4.900 beneficiarios frente a los 2.900 de 2012, según ha informado la institución con motivo de la conmemoración, este viernes, del Día Mundial del Refugiado.
"Huyen por necesidad. Escapan de conflictos armados o de otras situaciones de vulnerabilidad como la persecución por motivos de género, orientación sexual, ideología, raza o religión que incluso llegan a poner en peligro sus vidas y las de sus familias. Y al llegar al país de destino se encuentran con graves problemas", recuerda Cruz Roja.
Entre ellos, cita los derivados de haber perdido sus redes de apoyo, pero también el desconocimiento del idioma y de las normas y pautas de funcionamiento de la sociedad de acogida. "La crisis económica en nuestro país dificulta especialmente su proceso de integración por la práctica imposibilidad de acceder al mercado laboral, lo que les aboca a una nueva situación de extrema vulnerabilidad y riesgo de exclusión social", explica.
Conforme destaca Almudena Echevarría, del Programa de Refugiados de Cruz Roja, su objetivo es "conseguir su integración", teniendo siempre respeto y consideración a su cultura de origen, a través de los servicios de Primera Acogida, atención social, psicológica, legal y económica y Acogida Temporal en centros y pisos.
Para llevar a cabo estas intervenciones Cruz Roja cuenta con la financiación del Fondo Europeo para los Refugiados (FER), la Subvención de Asilo (Dirección General de Migraciones) y de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), pero no es suficiente, según destaca José Javier Sánchez, subdirector de Inclusión Social de la organización humanitaria: "la crisis afecta a todas las personas, y especialmente a un colectivo que se encuentra en situación de extrema vulnerabilidad".