Actualizado 25/06/2012 17:25

Cruz Roja pide un acuerdo "sin equívocos" entre las partes para garantizar el acceso de sus equipos a Homs (Siria)


GINEBRA, 25 Jun. (Reuters/EP) -

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha pedido este lunes un acuerdo "sin equívocos" entre las dos partes enfrentadas en Siria para garantizar el acceso libre y seguro de sus equipos a la ciudad siria de Homs a fin de evacuar a los civiles y a los heridos atrapados por la violencia.

En declaraciones a la prensa en Ginebra, el presidente del CICR, Jakob Kellenberger, ha explicado que los equipos de la organización han intentado entrar en Homs después de que las fuerzas gubernamentales y las opositoras aceptaran la semana pasada una tregua humanitaria y ha advertido de que sus trabajadores se enfrentan a riesgos reales para su seguridad en la ciudad, entre los que se incluyen las bombas trampa.

"Hoy hemos hecho una segunda gestión para poder volver a sitios relevantes de Homs junto con la Media Luna Roja Siria", ha declarado. "El acuerdo entre las partes de un conflicto es necesario para realizar esa labor. También hay una preocupación real por la seguridad, por las bombas trampa y otras cosas", ha añadido.

Kellenberger ha señalado que el CICR mantiene una "firme voluntad" de entrar en la ciudad de Homs, donde hay cientos de civiles atrapados y los heridos necesitan asistencia médica urgentemente. "Si queremos entrar es, obviamente, porque creemos que hay grandes necesidades humanitarias", ha explicado.

Los trabajadores humanitarios han estado intentando entrar en Homs desde que las fuerzas del régimen de Bashar al Assad y los rebeldes que quieren derrocarlo accedieron a detener los enfrentamientos temporalmente la semana pasada. Pero el CICR y la Media Luna Roja Árabe Siria se vieron obligados a darse media vuelta el jueves pasado tras oír disparos al entrar en el casco viejo de la ciudad.

LA ÚNICA ORGANIZACIÓN HUMANITARIA PRESENTE EN SIRIA

El CICR también pretende ofrecer su ayuda en Alepo, Latakia y Tartus esta semana. Su presidente ha destacado que es "la única organización humanitaria internacional" que está trabajando en Siria "en este contexto tan peligroso". "Y no está de más decirlo", ha agregado. Actualmente tiene 30 trabajadores sobre el terreno que, según Kellenberger, se mueven sin escoltas armados.

Un voluntario de la Media Luna Roja Siria murió al recibir un disparo el viernes pasado mientras trabajaba en la provincia de Deir al Zor, donde se han producido intensos enfrentamientos entre las fuerzas de Al Assad y los rebeldes.

La ONU, que el viernes pasado advirtió de que un millón y medio de sirios necesitan ayuda, aún está tratando de enviar trabajadores humanitarios a Siria en virtud de un acuerdo que alcanzó este mes de junio con el Gobierno para poner en marcha un gran programa de ayuda, aunque la Media Luna Roja Siria ya ha distribuido algunos suministros.

"¿Una organización de la ONU estaría preparada en lo que a seguridad se refiere para trabajar sobre el terreno en este contexto? Hay una gran diferencia entre encargar a otro la responsabilidad de la labor humanitaria y llevar a cabo tú mismo la labor humanitaria", ha indicado Kellenberger.

Desde el pasado septiembre, representantes del CICR han visitado dos prisiones, en Damasco y en Alepo, para asegurarse de que las personas que se encuentran en ellas están en unas condiciones decentes y para prevenir el uso de la tortura. Sin embargo, su presidente ha resaltado que aún no han conseguido entrar en cárceles controladas por las fuerzas opositoras.