MADRID, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Federación Española de Familias Numerosas, Eva Morgado, aseguró que actos como la eucaristía por la familia que se celebró ayer en la Plaza de Lima de Madrid con motivo de la Sagrada Familia "mueven las conciencias" tanto de católicos como de "toda la sociedad" dado el momento "no sólo de crisis económica, sino de insatisfacción general" que se da entre la población.
En declaraciones a Europa Press, indicó que la concentración "entrañable" de ayer convocada por los obispos cumplía "un día significativo dentro del calendario religioso" en el que se pidió y rezó "por la unión de las familias que es lo que realmente puede ayudar a ser mejores personas".
Asimismo, subrayó que "no era momento de lanzar proclamas contra nadie" y que "simplemente" acudieron familias "de todo tipo" identificadas con "estas manifestaciones piadosas" donde la Iglesia celebra el sentido de formar una familia "similar a la de Belén".
Por su parte, el presidente del Foro de la Familia, Benigno Blanco, resaltó la intervención de ayer del Papa en la que ensalzó "el valor de la familia, del matrimonio y del derecho a la vida", al tiempo que matizó que dicha eucaristía "fue lo que se esperaba que fuese" y tuvo un carácter litúrgico "que no es posible politizar".
Además, apuntó que "una vez más" se pone de manifiesto que son "muchísimas las personas en España" que valoran la familia y lo hacen notar en este tipo de concentraciones y subrayó que, a su juicio, la Iglesia es la entidad que "con más coherencia y perseverancia defiende la familia y el matrimonio", algo que "la honra profundamente", concluyó.
LA IGLESIA ESTÁ "ANTICUADA"
Por otro lado, la presidenta de la Unión de Asociaciones Familiares (UNAF), Juana Angulo, explicó que, a su parecer, la Iglesia está "un poco anticuada" porque "teme perder el poder que siempre ha tenido sobre el patriarcado" y en la actualidad, añadió, "las familias son varias y diversas".
En este sentido, Angulo mostró su rechazo ante las palabras de ayer pronunciadas por el arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, en las que defendía la familia formada por "padre, madre e hijos" o su posición "en contra del matrimonio homosexual".
