Un sacerdote ruandés pide ayuda para miles de niños refugiados que no cuentan con ayuda de ninguna ONG en El Congo

Europa Press Sociedad
Actualizado: martes, 4 diciembre 2007 17:43

MADRID 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

El padre Amable Runyange, de nacionalidad ruandesa, ha denunciado que miles de niños ruandeses viven "en condiciones infrahumanas" en la República del Congo, sin que ninguna ONG ofrezca asistencia a "todos estos niños, la mayoría huérfanos, que viven abandonados a su suerte", especialmente desde que ACNUR abandonara la zona recientemente por falta de presupuesto.

Estos niños son hijos de refugiados ruandeses que hace diez años tuvieron que salir de su país huyendo de la guerra entre los hutus y los tutsis, y que, tras una travesía de miles de kilómetros a través de selva del Zaire, se instalaron en campos de refugiados en la República del Congo.

Según denuncia Amable, que ha pedido ayuda a la comunidad internacional, en esos campos "no disponen de agua ni medicinas, y cientos de personas han ido muriendo, dejando huérfanos a miles de niños que viven abandonados".

Según el padre Amable (www.padreamable.com), "el problema se verá agravado en los próximos meses, ya que ACNUR, la única ONG que trabajaba con ellos, se ha marchado de la zona por falta de presupuesto".

La misión del Padre Amable se encuentra en Loukolela, un poblado de chozas en el norte de la República del Congo, al que se accede después de remontar durante dos días el río Congo. Las casas carecen de agua potable o electricidad. Entre las enfermedades que sufren los niños, destacan diarreas o gastroenteritis.

Un grupo de personas de distintas procedencias colabora desde España con el padre Amable para dar a conocer su labor y buscar ayuda, económica y de todo tipo, para sus proyectos.

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