GAZA, 20 Nov. (Reuters/EP) -
Al menos 50 familias gazacíes que viven cerca de la línea de frente con Israel han huido de sus hogares en los siete días que dura ya la ofensiva aérea israelí sobre la Franja de Gaza pero muchas más personas se verían desplazadas si hubiera una ofensiva terrestre, ha advertido la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) este martes.
La UNRWA, que presta asistencia a más de un millón de palestinos en Gaza, ha llevado a los desplazados a una de sus escuelas para darles "cobijo protegido", y les ha ofrecido colchones, mantas y algunas herramientas de cocina.
Por ahora no ha habido desplazamientos masivos, reconoce el comisionado general de la UNRWA, Filippo Grandi, en declaraciones a Reuters durante una visita a un centro de distribución en la Franja de Gaza.
"Lo que normalmente desencadena el desplazamiento es una operación terrestre, una ofensiva terrestre. Por eso realmente esperamos que no se produzca una ofensiva terrestre ya que entre otras muchas cosas, también causará un montón de problemas humanitarios", ha subrayado Grandi.
Según ha informado la agencia en un comunicado, este martes abrió doce centros de distribución en los que se repartieron alimentos a más de 25.000 beneficiarios.
La agencia ha explicado que esta distribución forma parte de su ciclo normal de reparto de alimentos entre octubre y diciembre. En caso de que sea necesaria ayuda alimentaria de emergencia, los productos se tomarán de la reservas de UNRWA. Por este motivo, afirma, "es urgente obtener financiación para cubrir la distribución de alimentos de emergencia que pueda ser necesaria debido a la escalada actual".
ATENCIÓN SANITARIA
Además, ayer abrieron 19 de los 21 centros de salud que tiene la agencia en Gaza. Los dos que permanecieron cerrados fue por su proximidad a la frontera. De acuerdo con los más de 650 trabajadores sanitarios de UNRWA, el domingo, uno de los días más sangrientos, se atendió a más de 10.500 pacientes.
Por otra parte, la agencia humanitaria ha denunciado que el 42% de los medicamentos esenciales se encuentran fuera de stock en la farmacia central del Ministerio de Salud de Gaza. Ante esta circunstancia, UNRWA afirma que "está preparada para donar suministros de sus reservas" si bien necesitará 308.800 euros para reponer posteriormente sus propias existencias.
Asimismo, UNRWA ha seguido recogiendo los desechos en los ocho campamentos de refugiados de toda Gaza para evitar que surja cualquier problema de salud pública. En comparación con un día normal, las operaciones de saneamiento han cubierto el 85% de los campamentos.
