Actualizado 05/10/2007 19:13

Un activista saharaui de Derechos Humanos sostiene que a la ONU no le interesa las vulneraciones cometidas por Marruecos

El Frente Polisario tomará en diciembre una postura decisiva sobre las conversaciones en el marco de la ONU


PAMPLONA, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -

El activista saharaui de Derechos Humanos Hmad Hamad afirmó que las vulneraciones en los territorios ocupados tiene lugar "delante de los propios ojos" de los representantes de la ONU, que "viven en lujosos hoteles" y no se interesan por los sufrimientos del pueblo saharaui.

Tras conseguir un visado a través de la embajada sueca - la española se lo denegó, según reprochó-, Hamad participó la semana pasada en la VI Sesión del Consejo de Derechos Humanos que se celebró en Suecia y de regreso recaló hoy en Pamplona, en donde se entrevistó tanto con el grupo parlamentario de apoyo al Sáhara como con la presidenta de Eusko Alkartasuna, que la semana que viene testificará en Nueva York ante la IV Comisión Marruecos-Sáhara, que recaba datos sobre la situación en los territorios ocupados.

Con motivo de esas reuniones, el activista ofreció sendas ruedas de prensa, en parte porque está preocupado por el recibimiento que le dispensará a su regreso la policía marroquí, a la que acusó de torturar a los disidentes.

"Los hospitales se han convertido en comisarías de la policía, en los colegios hay dos policías por clase, algunos han sido quemados en comisaría, incluso dejan tirados en medio del desierto, desnudos, a mujeres y niños y cuando entran en una vivienda roban joyas y dinero", indicó el activista, que por primera vez ha conseguido salir de los territorios ocupados. Según dijo, en 1990 pidió asilo en la embajada española y fue entregado a las autoridades marroquíes, quienes lo secuestraron y torturaron.

Con su visita a Pamplona, quiere denunciar públicamente lo que ocurre en los territorios ocupados y en los campamentos argelinos. "La gente grita pero no se oye por el cerco informativo a la prensa y a la presencia de observadores", explicó Ibrahim Salem, delegado saharaui en Navarra.

Errazti criticó que la ONU está "cerrando los ojos" a la vulneración de los Derechos Humanos y que incluso organizaciones internacionales dependientes están aminorando en un 80 por ciento la ayuda humanitaria a los campamentos para presionar a los saharauis y al gobierno de la República Árabe Saharaui. En su opinión, se puede hablar de "genocidio". Según criticó en la lista de las vulneraciones de Derechos Humanos por parte de Marruecos está "toda la lista posible", desde desapariciones a torturas.

CONGRESO

El Frente Polisario celebrará en diciembre un congreso en el que se adoptarán decisiones "decisivas" sobre la continuidad o no del proceso iniciado en 1991, cuando aceptó un alto el fuego para posibilitar la celebración de un referéndum, tal y como proponía la ONU. En 2005, la población salió "a la calle" harta de 35 años de vulneraciones de los Derechos Humanos.

"No podemos mantener indefinidamente el alto el fuego decretado en 1991 porque era una cláusula del plan para el referéndum", una plan que ha sido rechazado, afirmó Ibrahim, quien recordó que la soberanía corresponde al pueblo saharaui.

Según criticaron los ponentes, la ONU no está cumpliendo sus resoluciones y Marruecos intenta imponer una autonomía, cuando es el pueblo saharaui el que debe determinar qué quiere, si la independencia, fruto de un proceso de descolonización, o la pertenencia a Marruecos.

Salem reconoció que no hay "perspectivas" de solución y cuestionó la posición de la ONU y de la Comunidad Internacional. También la del actual Gobierno de España, "responsable del drama" y que no representa el apoyo generalizado de los españoles a la causa saharaui.

Por su parte, el activista Hamad lamentó que el ministro de Asuntos Exteriores de España, Miguel Ángel Moratinos, denunciara la semana pasada las violaciones que se están cometiendo en Birmania "mientras que no hace alusión al Sahara". "Nosotros- apuntó- tenemos más de 500 desaparecidos y las cárceles llenas de presos y no oímos declaraciones al respecto del Gobierno de España". Hamad recibió el pasado 30 de septiembre el premio José Antonio González Caraballo a la Federación Andaluza de Solidaridad con el Pueblo Saharaui.