Actualizado 28/09/2007 21:14

Clima.- Bush defiende que sea cada país quien fije sus objetivos para reducir las emisiones contaminantes y cómo hacerlo

WASHINGTON, 28 Sep. (EP/AP) -

El presidente estadounidense, George W. Bush, pidió hoy a los países más contaminantes del mundo que fijen un objetivo para reducir los gases con efecto invernadero que están provocando el cambio climático, sin excluir de la lista a Estados Unidos.

"Fijando esta meta, admitimos que hay un problema, y fijando esta meta, nos comprometemos a hacer algo sobre él", afirmó Bush en su discurso que pone fin a una conferencia de dos días sobre el cambio climático convocada por la Casa Blanca. "Compartimos una responsabilidad común: reducir las emisiones de gases con efecto invernadero al tiempo que mantenemos el crecimiento de nuestras economías", aseveró.

Según el presidente estadounidense, cada país debería fijar por sí misma qué métodos empleará para controlar el problema de la contaminación sin perturbar su crecimiento económico.

En la conferencia participan representantes de 16 países, entre ellos China e India, así como la Unión Europea y también Naciones Unidas. Bush defiende el uso de tecnologías limpias y otros esfuerzos voluntarios para controlar el calentamiento global. Según el presidente, el objetivo de reducción debería estar cerrado para mediados de 2008, junto con los medios para medir los progresos para lograrlo.

Asimismo, propuso la creación de un fondo internacional para financiar la investigación de tecnologías energéticas limpias, anunciando que el secretario de Tesoro, Henry Paulson, coordinará los esfuerzos y estará en contacto con otros gobierno sobre los avances.

"Cada país debe decidir por sí misma la combinación adecuada de herramientas y tecnologías para alcanzar los resultados que sean medibles y medioambientalmente eficientes", afirmó Bush.

En su discurso, Bush admitió que el cambio climático es real y que la actividad humana es un factor que influye. Pero el presidente norteamericano se niega a firmar ninguna reducción de emisiones obligatoria, optando por animar el desarrollo de nuevas tecnologías y otras medidas voluntarias. Asimismo, ha dejado claro que no participará en ninguna conversación para un acuerdo global en la materia que no incluya a los países en desarrollo más contaminantes.

Por su parte, el responsable de Clima de la ONU, Yvo de Boer, indicó a los 16 participantes en la reunión que "este relativamente pequeño grupo de países tiene la llave para controlar una gran parte de este problema" pero su respuesta sólo puede tener éxito "yendo mucho más allá de los esfuerzos actuales", especialmente los países ricos e industrializados.

Bush aseguró hoy que Estados Unidos es serio respecto al problema y está comprometido a reducir la tasa de emisión de dióxido de carbono y otros gases industriales de efecto invernadero así como a que haya un pacto global. "Trabajando juntos estableceremos políticas sabias y eficientes", opinó. "Quiero que el trabajo se lleve a cabo, hemos identificado el problema, ahora resolvámoslo juntos", concluyó.