Actualizado 26/01/2009 20:09

Cuba se presentará por primera vez en 20 años ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas

LA HABANA, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -

Cuba se presentará, por primera vez en 20 años, ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas pero exige respeto, según afirmó hoy la subdirectora de Asuntos Multilaterales de la Cancillería cubana, María del Carmen Herrera, en una entrevista concedida al diario cubano 'Juventud Comunista'.

"Cuba asiste al Examen Periódico Universal en defensa de la verdad. Estamos abiertos al diálogo y brindaremos la información y aclaraciones necesarias. Sólo exigimos respeto", pidió la subdirectora. Este informe sobre la situación de los Derechos Humanos se exige a todos los países representados en la ONU y es un mecanismo de revisión periódica.

Herrera remarcó las diferencias con la antigua Comisión de Derechos Humanos de la ONU (CDH), con la que Cuba se negó a cooperar durante años, ya que consideraba que tenía un trato discriminatorio con los países del Tercer Mundo. "La CDH se transformó de hecho en un tribunal inquisidor contra los países del sur, donde los países del norte, comenzando por Estados Unidos, tenían garantizada su impunidad", dijo María del Carmen Herrera.

Cuarenta y ocho naciones ya han tenido que presentarlo y el 5 de febrero, junto a Cuba, lo entregarán otros 15 países de cuatro continentes, informó la BBC. El Examen Periódico Universal transcurre durante tres horas en las que se establece un diálogo entre el país inspeccionado y el resto de los Estados, los cuales pueden plantear preguntas, dudas y comentarios.

DIFERENCIAS CON EL ORGANISMO

En el pasado, Cuba fue condenada 20 veces por la CDH, la cual, incluso, nombró varios relatores sobre el tema para inspeccionar la isla sin que ninguno de ellos recibiera permiso del Gobierno cubano para entrar. El actual informe de Cuba consta de 20 páginas y fue elaborado con la asistencia de diferentes instituciones del Estado y de más de 300 ONG nacionales, la totalidad de ellas afines al gobierno.

Este hecho ha levantado protestas dentro de la Comisión de Derecho Humanos, que, en una nota firmada por su presidente, Elizardo Sánchez, cuestiona el informe por haberse "elaborado a puerta cerrada", lo cual "no permite reconocerle la necesaria credibilidad".

Entre las omisiones marcadas por Sánchez se encuentra la prohibición de que inspectores internacionales visiten las cárceles, las leyes que impiden la libre contratación laboral, la inexistencia de sindicatos independientes y las trabas para entrar y salir del país.

El Gobierno cubano afirma por su parte que los disidentes son mercenarios pagados por Washington. En el informe a la ONU dice que las agresiones de Estados Unidos "han transitado de invasores a terroristas y de terroristas a falsos defensores de Derechos Humanos".

En el documento, que será presentado oficialmente en febrero, se destaca el derecho de los cubanos a la salud y la educación y la libertad religiosa y de asociación, que se reflejan en la existencia de más de 2.000 grupos de la sociedad civil. Respecto a los problemas que aún persisten en el terreno de los Derechos Humanos, La Habana afirma que el principal responsable de la violación del derecho a la paz, a la vida y a la libre determinación es el Gobierno de Estados Unidos y su hostilidad contra Cuba.

"La política de hostilidad, bloqueo y agresiones de sucesivos Gobiernos de Estados Unidos contra Cuba ha sido un grave obstáculo al pleno disfrute de los Derechos Humanos y las libertades fundamentales de cubanas y cubanos", dice el informe.

La Habana anunció que el documento cubano será presentado ante Naciones Unidas por la ministra de Justicia, María Ester Reus, y por el viceministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez.