Actualizado 19/11/2009 14:00

Defensor del Pueblo cree "incorrecta" la expulsión de un boliviano con problemas psíquicos que estuvo en CIE de Málaga

MÁLAGA, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, considera "incorrecta" la ejecución de expulsión de un boliviano de 30 años que, tras pasar 26 días en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Málaga, falleció el 4 de diciembre de 2008 a causa del "impacto de la repatriación en su delicado estado psíquico y la ausencia adecuada de supervisión médica en el lugar de destino".

Así, desde la institución manifestaron, en una carta remitida el pasado 11 de noviembre a diversas asociaciones malagueñas, que, "debido al estado de salud tan precario en el momento de la expulsión de Eduardo Medina Flores, ésta no debió materializarse hasta comprobarse y cerciorarse de una mejoría del estado de saludo mental del interno".

Este escrito fue presentado hoy por diferentes integrantes de la Plataforma de Solidaridad con los Inmigrantes y de la Asociación 'Amigos de Bolivia'. El presidente de la primera, Luis Pernía, señaló "la preocupación por el devenir del fenómeno migratorio", y calificó los CIE como "centros de sufrimiento humano", ya que "Eduardo vino de Bolivia con el sueño europeo y murió fruto de la tristeza y el desencanto".

Uno de los miembros de la plataforma, Gabriel Ruiz, e integrante de Médicos del Mundo, informó de que Medina, mientras dormía en la calle, sufrió abusos sexuales, y sus circunstancias le afectaron para el surgimiento de los problemas, en un principio, psicológicos, y más tarde físicos.

Ruiz explicó que en el CIE de Málaga tuvo un intento de suicidio, de lo que había imágenes que no se han conservado porque "fueron destruidas conforme a la legislación vigente", según un informe de la Comisaría Provincial trasladado al Defensor del Pueblo.

A los pocos días de ingresar en el CIE, y, tras su intento de suicidio, se le dio atención psicológica por parte de Médicos del Mundo, aunque "no se pudo hacer nada por su empeoramiento", afirmó Ruiz, al tiempo que indicó que en su asistencia a la atención sanitaria "iba acompañado de dos policías armados, que se negaron a quitarle las esposas para recibir la atención".

LA VUELTA A BOLIVIA

Por otra parte, la Subdelegación del Gobierno de Málaga remitió al Defensor del Pueblo un informe en el que se recoge que "Medina recibió un trato especial debido a su patología", y se señala que "en el momento de su salida se le entregaron los medicamentos que le habían sido prescritos por el médico, así como sus pertenencias".

Del mismo modo, en el informe se apunta que "se avisó a la madre del día de la salida, número de vuelo y hora prevista de llegada a Bolivia; también dieron aviso a la Asociación 'Amigos de Bolivia' para que recogieran la maleta y se la hicieran llegar".

Uno de los miembros de la Asociación 'Amigos de Bolivia', Gerardo Valentín, afirmó que la familia se encuentra en una situación extrema de pobreza y tanto el padre como uno de los hermanos del fallecido tienen una enfermedad terminal. Además, matizó que esta familia contrajo grandes deudas para que Eduardo Medina pudiera viajar a España, las cuales "se les ha ayudado a pagar desde esta asociación".

A pesar de las circunstancias que envolvieron la estancia en Málaga de Eduardo Medina, según informaron desde la asociación, la madre comunicó "su agradecimiento a todos los españoles por el buen tratamiento que se le había dado".

De otra forma, anunciaron que se tiene constancia de que existen otros casos como éste en el CIE de Málaga que se han remitido al Defensor del Pueblo, y pusieron como ejemplo el caso de un joven con trastornos psíquicos que fue expulsado en julio.