SANTANDER, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo penal número Cuatro de Santander ha condenado a dos años de prisión a un hombre con un retraso mental leve-moderado que, al menos en dos ocasiones, abusó sexualmente de un menor de 7 años, al que llevó a su domicilio y le hizo bajarse los pantalones y los calzoncillos, entregándole después pequeñas cantidades de dinero.
La sentencia considera al acusado autor de un delito continuado de abuso sexual, con la eximente incompleta de anomalía o enfermedad psíquica. Además de la pena de cárcel, se le prohíbe acercarse al menor a menos de 200 metros por un plazo de tres años y a indemnizarle con 3.000 euros.
El fallo considera probado que el acusado, Daniel O.R., con antecedentes penales no computables a efectos de reincidencia, consiguió convencer al menor, al menos en dos ocasiones, entre los meses de junio y septiembre de 2006, para que le acompañara a su domicilio, movido por "un claro ánimo de satisfacer sus deseos sexuales".
Tras hacer que éste se bajara los pantalones y los calzoncillos, frotó sus genitales contra la espalda y contra los glúteos del menor, entregándole después diversas cantidades de dinero que oscilaban entre los 5 y los 10 euros.
Cuando sucedieron los hechos, el acusado padecía un retraso mental leve-moderado, así como un pobre control de sus impulsos, lo que afectaba sus capacidades cognoscitivas y volitivas de forma moderada, según la sentencia.