El Ministro de Exteriores italiano niega motivaciones religiosas tras enfrentamientos en el sur
ROMA, 12 Ene. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Gloria Moreno) -
El Ministerio de Exteriores egipcio denunció hoy la "campaña de agresión" y de "violencia" que están sufriendo "los inmigrantes y las minorías árabe y musulmana en Italia", según publicó a través de una nota.
La reacción del Gobierno egipcio tiene lugar después de los enfrentamientos registrados a finales de la semana pasada en la sureña localidad italiana de Rosarno como consecuencia del ataque sufrido por un grupo de inmigrantes.
Sin embargo, la mayoría de éstos proceden de países del África subsahariana y no de Egipto. Aun con todo, el Gobierno de El Cairo hace referencia al incremento del racismo en general que se está registrando en Italia en estos últimos tiempos.
En la misma nota, Egipto pide a las autoridades del país transalpino que "emprendan las medidas necesarias para proteger a las minorías y a los inmigrantes", al tiempo que anuncia que su ministro de Exteriores, Aboul Gheit, abordará este tema en el encuentro que mantendrá con su homólogo italiano, Franco Frattini, esta misma semana.
Por su parte, Frattini respondió a estas acusaciones afirmando que "nadie" puede acusar a Italia de racismo. Asimismo, negó que tras los hechos de Rosarno haya motivaciones religiosas. En cuanto a las relaciones con la comunidad egipcia que vive en Italia, aseguró que la gran mayoría tiene papeles y "no crea ningún problema".
Hasta este fin de semana, en Rosarno y sus alrededores vivían cerca de 1.500 inmigrantes, la mayor parte de ellos procedentes del África subsahariana, los cuales trabajaban en negro en la recolección de la naranja. Las condiciones de vida y de trabajo de estas personas era denigrante, tal y como llevaban denunciando diversas organizaciones humanitarias desde hacía años.
La semana pasada, dos de ellos sufrieron una agresión, la cual desató la rabia de los inmigrantes, que invadieron Rosarno, destruyendo todo lo que se encontraban por delante. La batalla campal ha originado la expulsión de los inmigrantes de la zona, que han sido trasladados a otros centros de acogida de Italia.
