La Embajada china en España se niega a recibir las 140.000 firmas de AI que piden el respeto a los DDHH en China

MADRID 10 Dic. (EUROPA PRESS) -

La embajada china en España se negó hoy a recibir las 140.000 firmas que Amnistía Internacional (AI) ha intentado entregar con motivo del Día Internacional de los Derechos Humanos, para pedir al país que abola la pena de muerte y libere a los periodistas y usuarios de Internet detenidos mientras ejercían su derecho de libertad de expresión, como un primer paso para dejar un legado positivo de Derechos Humanos tras las próximas olimpiadas de 2008 en Beijing.

Ante la negativa de la Embajada de recibir las firmas y una carta, "porque ya habían recibido muchas de ellos", según un portavoz de la legación diplomática, AI España seguirá recogiendo firmas hasta agosto de 2008, coincidiendo con la fecha de los juegos olímpicos en China, porque la organización defiende que además de organizar los juegos, el principal legado de China debería ser la protección y defensa de los Derechos Humanos, afirmó el director de AI España, Esteban Beltrán.

La organización presentó hoy la campaña '¿Sabes a qué se juega en China?', en la que cuatro activistas, simulando ser atletas, representaron una carrera en la que cada calle representaba una denuncia que AI hacía a China.

La primera calle es 'la pena de muerte', "ya que en 2006 fueron ejecutadas más de 1.000 personas, que representan el 65% de todas las ejecuciones del mundo", subrayó Beltrán, quién señaló que así también aumenta el tráfico de órganos. La segunda, 'la censura', "porque más de 30.000 policías se dedican a controlar Internet, censurar a periodistas y clausurar publicaciones", argumentó Beltrán. En la tercera se situaban 'las detenciones ilegales', que se practican sin cargo ni juicios y por largas temporadas, explicó el director de AI España.

Y en la cuarta, 'la represión a activistas pro Derechos Humanos', "que sufren torturas, condenas falsas y juicios injustos", añadió Beltrán. El acto finalizó con una entrega de premios a los activistas que consistió en una pancarta simbólica en la que se podía leer el lema 'Derechos Humanos en China ya'.