MADRID, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
Miles de desplazados internos ceilandeses que permanecían retenidos desde hacía meses en los campamentos situados en el norte de Sri Lanka son, a partir de este lunes, libres para salir y entrar de los mismos, un hecho que ha sido bien recibido por la ONU y diferentes ONG.
"Es una decisión del Gobierno muy bienvenida", aseguró el director ejecutivo de la ONG Consejo Nacional para la Paz de Sri Lanka, Jehan Perera. "Es una decisión oportuna y, aunque debería haber sucedido hace mucho tiempo, le damos la bienvenida", declaró a la agencia de noticias humanitarias de la ONU, IRIN.
El Gobierno declaró el mes pasado que habría libertad de movimiento para más de 100.000 personas que permanecían retenidas en estos campamentos masificados y dirigidos por el Estado --que los denomina "aldeas del bienestar"-- y reiteró su promesa ayer.
"Las aldeas serán declaradas abiertas a partir de ese día (...), el Gobierno ha declarado que todos los civiles serán libres para abandonar las aldeas una vez que hayan dado sus datos personales a las autoridades", de acuerdo con el comunicado de ayer.
Por su parte, un portavoz de la ONU, Gordon Weiss, afirmó que los desplazados tienen diez días para regresar a los campamentos una vez que los abandonen. "Al mediodía, casi 6.000 personas podrán dejar los campamentos (...), es un gran paso para las personas que estaban confinadas", aseguró Weiss.
Este portavoz detalló que los desplazados han sido registrados y se les dará una ficha que devolverán a su regreso. "Tiene un propósito doble, ya que con ella se hará un seguimiento de las personas que dejen los campamentos y harán que estos sean más seguros y que no entren personas que no deberían estar allí", afirmó.
Casi 280.000 personas que huyeron del enfrentamiento en los últimos meses del enfrentamiento entre el Gobierno y los rebeldes Tigres de Liberación de la Tierra Tamil (LTTE). El Gobierno ceilandés, bajo la gran presión de la comunidad internacional, ha agilizado los procesos para dar libertad a los desplazados.
De acuerdo con la última Actualización Humanitaria con fecha de 19 de noviembre, al menos 136.242 personas continúan en los campamentos situados en el noroeste del país, mientras que 112.209 han regresado a sus lugares de origen y casi 28.000 están en familias de acogida.
Según Weiss, se espera que un gran número de personas permanezcan en los campamentos a pesar de su apertura y que el reasentamiento se produzca a lo largo de los meses. "El proceso de retorno no está exento de problemas. Mucha gente quiere regresar en un corto período de tiempo, y hay muchas zonas que no están preparadas", detalló.
