MÉRIDA, 1 May. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente segundo de la Junta y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, ha llamado a la responsabilidad de los ciudadanos ante la desescalada y ha dado a conocer que la próxima semana planteará al Gobierno de España que la región pueda pasar a la fase 1.
Vergeles ha realizado estas declaraciones en una ruda de prensa telemática ofrecida este viernes en Mérida, en la que ha añadido que no le gustaría que por hablar del tema de la desescalada los ciudadanos se olvidasen de que aún se está combatiendo al virus, porque todavía hay contagios y fallecimientos.
Así, Vergeles ha mostrado su orgullo por la respuesta "ejemplar" de la sociedad extremeña hasta el momento, además de añadir que está convencido de que este sábado volverá a dar una nueva lección sin que se produzcan vulneraciones del distanciamiento social.
De esta forma, y ante la posibilidad de que este sábado los ciudadanos puedan hacer deporte no profesional o dar paseos, que se unirán a los paseos que ya podían dar los menores acompañados por un adulto, el consejero ha dejado claro que aún se está haciendo frente a la pandemia.
Asimismo, ha indicado que la próxima semana la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales planteará al Ejecutivo central que Extremadura pueda pasar a la fase 1 en el plan de desescalada.
"No está decidido todavía porque necesitamos analizar los indicadores, no está decidido todavía cuáles van a ser esos territorios, pero nosotros nos inclinaríamos a que fuesen las dos provincias si así lo permiten los indicadores", ha dicho.
La semana que viene, ha dicho, también propondrá al presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, establecer una fecha para poder sentarse con los grupos parlamentarios para trasladarles el deseo de pasar a fase 1 y en qué zonas se solicita el paso a dicha fase.
FASE CERO
En esta línea, el consejero ha resaltado que en estos momentos Extremadura ha entrado en la fase cero de la desescalada, situación en la que se encuentran ambas provincias, y ha informado sobre las tareas que la administración autonómica tiene que hacer, entre las que se encuentra construir un cuadro de mando que incluya una serie de indicadores para saber qué está ocurriendo con cada uno de los contagios que se produzcan en Extremadura por si llega el momento de poner en aislamiento un posible brote o volver atrás en esa fase de transición.
También ha indicado que hay que ser capaces de trabajar en un cuadro de indicadores que recoja las capacidades de la comunidad para saber si está o no preparada por si en la desescalada hubiera que hospitalizar, ingresar en UCI o aislar domiciliariamente a más personas.
El tercer gran grupo de indicadores, ha explicado el consejero, es el de la movilidad, tanto entre provincias como dentro de la provincia, unos indicadores que serán aportados por el Ministerio de Movilidad, mientras que el cuarto obedece a los indicadores socioeconómicos.
El consejero extremeño también, y de cara a los movimientos permitidos a partir de este sábado y sus franjas horarias, ha resaltado que el 80 por ciento de los núcleos de población de Extremadura no tendrán restricciones horarias porque tienen menos de 5.000 habitantes.
