Foto: EUROPA PRESS
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SANTIAGO DE COMPOSTELA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
La CIG ha recogido a lo largo de esta semana unas 700 firmas, entre personal y usuarios del servicio de Urgencias del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), con el objetivo de denunciar la "precariedad" en la que los sanitarios se ven "obligados" a trabajar.
Estas 700 firmas han sido entregadas este viernes en el registro del Servizo Galego de Saúde (Sergas), desde donde serán derivadas al Valedor do Pobo y Fiscalía.
El propósito, según ha precisado María Xosé Suárez, delegada de la CIG y enfermera en el servicio de Urgencias del CHUS, es "poner en conocimiento" de estos tres entes --Valedor, Fiscalía y Sergas-- las "condiciones penosas" que acontecen en este servicio de urgencias.
Y es que sostiene Suárez que los sanitarios están atendiendo "más" número de enfermos del "recomendado" para mantener la "seguridad" de trabajadores y usuarios. "No creemos que estemos dando una asistencia digna", ha remarcado Suárez, quien no considera que los usuarios se "merezcan" las condiciones en las que se les está "tratando".
A renglón seguido, ha censurado que los recursos destinados a la sanidad pública "se estén recortando en beneficio de las empresas privadas", al tiempo que ha criticado a la gerencia del CHUS por "no respetar" un acuerdo alcanzado hace tres años.
CALIDAD, "MERMADA POR TODOS LOS LADOS"
Por ello, esta enfermera del servicio de Urgencias del CHUS y delegada de la CIG ha explicado que, ante la falta de respeto con respecto a este acuerdo, la CIG ha decidido "llegar más arriba" con su denuncia. "A ver si conseguimos el respaldo necesario para una seguridad laboral y de los enfermos", ha confiado.
Y es que ha hecho hincapié en que la calidad se ha visto "mermada por todos los lados", con listas de espera "interminables". "Se puede dar cita en determinados servicios para 2016", ha remarcado, justo antes de condenar el hecho de que algunos pacientes quirúrgicos sean "derivados a sus casas" con "drenajes".
Este último hecho, a juicio de Suárez, fuerza a las familias a "convertirse en médicos y enfermeras" de sus familiares. "Pedimos por eso apoyo a los usuarios", ha explicado, para que ellos también "denuncien" y respalden a los sanitarios del servicio de Urgencias del CHUS.