El juicio fue suspendido al alcanzar un acuerdo las partes que incluye cuatro años de tratamiento psiquiátrico para la condenada
A CORUÑA, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
Una joven de A Coruña fue condenada a seis años de prisión por matar a su hija recién nacida después de dar a luz en 2006 en la frutería en la que trabajaba y tirar el bebé en un contenedor de basura. También deberá cumplir cuatro años de tratamiento psiquiátrico.
El fiscal pedía para la joven María Belén Prado 18 años de cárcel que se redujeron finalmente al reconocer ésta el delito de asesinato. El juicio estaba previsto en el Juzgado de Instrucción Número 5 de A Coruña a partir de mañana pero se suspendió al alcanzar un acuerdo las partes.
A la hora de calificar el delito, se tuvo en cuenta el agravante de parentesco. No obstante, la sentencia recoge la atenuante de que la acusada tiene un trastorno de personalidad de tipo esquizoide.
Así, se señala que, en el momento de los hechos, tuvo lugar "un episodio disociativo con desconexión parcial de la realidad" que disminuyó su conocimiento de la "ilicitud del hecho" y "limitó sus facultades mentales".
Finalmente el padre del bebé fallecido no recibirá la indemnización solicitada por el fiscal por daños morales y materiales que ascendía a 80.000 euros.
HECHOS
El 24 de marzo de 2006 María Belén Prado se sintió indispuesta, debido a su embarazo del que no había informado a nadie. Se encontraba trabajando como vendedora en Frutas Esther, establecimiento situado en el número 27 de la calle San Vicente de la ciudad herculina.
En su lugar de trabajo, la chica acudió al cuarto de baño y dio a luz a una niña de 2,615 kilos y 49 centímetros, después de entre 38 y 42 semanas de gestación. La joven decidió desgarrar el cordón umbilical, lo que provoco una "exanguinación" de la niña que causó un sock hipovolémico y su muerte sobre las 13.00 horas. Posteriormente escondió el cuerpo y lo tiró a un contenedor cercano a la frutería, abandonando el lugar para dirigirse a su domicilio.
La mujer fue detenida en su domicilio media hora después, tras ser alertada la Policía sobre la presencia de manchas de sangre "alarmantes" que había dejado en las inmediaciones de su vivienda. La mujer fue llevada al Hospital Materno Infantil de A Coruña para su "completa curación" y permanece en prisión desde el 24 de marzo del año pasado.
