VIGO 19 May. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil de Tráfico ha imputado a un vecino de Vilagarcía de Arousa (Pontevedra) que tenía el permiso de conducir caducado y se dio a la fuga después de ser cazado cuando circulaba a 136 kilómetros por hora en un tramo limitado a 50.
Según ha informado el Instituto Armado, los hechos ocurrieron el pasado día 8 en un control estático de velocidad ubicado en la carretera PO-307, en la parroquia de San Miguel de Deiro. Allí, un radar detectó a un vehículo que circulaba a 136 kilómetros por hora en un tramo de vía urbana limitado a 50.
El conductor, al darse cuenta de que había sido detectado por el radar, se desvió por un camino local antes de llegar al punto donde iba a ser parado por los efectivos con el objetivo de evitar, "de forma supuestamente intencionada", su posterior identificación.
La Guardia Civil inició una investigación que permitió localizar al conductor infractor, un joven vecino de la villa de Vilaxoán (Vilagarcía de Arousa) que en el momento de los hechos conducía un Volkswagen Golf.
Una vez localizado, se comprobó que el joven tenía el permiso de conducir caducado, por lo que fue imputado carecer de licencia en vigor y por haber circulado a exceso de velocidad.
Asimismo, la Guardia Civil también ha imputado a otro joven, un vecino de Soutomaior, que fue interceptado el pasado fin de semana en Silvoso cuando conducía un ciclomotor que carecía del seguro obligatorio y tenía la ITV caducada.