Pesca.- Un total de seis percebeiros murieron y ocho resultaron heridos de gravedad en los últimos cinco años

Actualizado: lunes, 19 noviembre 2007 14:26

El BNG recuerda que una de las fallecidas tenía 64 años y reprueba que el Gobierno central no les facilite jubilarse antes

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

Un total de seis percebeiros murieron entre 2003 y 2007, cinco de ellos en los últimos dos años, y ocho resultaron heridos de tal gravedad que le supuso invalidez.

Así lo reveló en la Comisión de Pesca el director xeral de Recursos Mariños, Antonio García Elorriaga, quien admitió que se trata de una actividad con "mucho riesgo" que en Galicia es realizada por 1.547 personas, de las cuales 1.120 la llevan a cabo en embarcaciones, ninguna de ellas de menos de un tripulante, y los 427 restantes son percebeiros a pie, 243 mujeres y 184 hombres.

García Elorriaga precisó que en 2003 un percebeiro resultó herido de gravedad; mientras que al año siguiente un accidente le costó la vida a otro; en 2004 se registraron tres siniestros que supusieron invalidez para sus protagonistas.

Los últimos dos años fueron los de peores cifras, ya que los tres accidentes registrados en 2006 se saldaron con dos percebeiros desaparecidos entre Ares y Ferrol y en Cabo Prior y otro que desapareció en Cedeira el 24 de noviembre, cuyo cadáver se localizó cuatro meses más tarde en Donosti.

A estos tres muertos se le suman otros dos en lo que va de año 2007, con dos percebeiros muertos en Monteferro y Xove, mientras que en este período cuatro personas resultaron heridas de gravedad en tres accidentes laborales.

REDUCIR SU EDAD DE JUBILACIÓN.

Para el portavoz de Pesca del Grupo Parlamentario del BNG, Bieito Lobeira, estos datos revelan que esta actividad que realizan 33 cofradías tiene una "altísima tasa de siniestralidad que no es de recibo", al tiempo que alertó que cuenta con una "dureza, penosidad y peligrosidad" que el Gobierno central "no quiere reconocer" a la hora de incrementar los coeficientes reductores para rebajar la edad de jubilación de estos trabajadores.

Precisamente, Lobeira recordó que la última fallecida en Xove tenía 64 años y advirtió de que no es el único caso, ya que en el caso de la localidad de Corme, tal y como ha revelado en otras ocasiones, hay percebeiras con más de 50 años; tres con más de 64 y una con 67. "No es justo que una persona de esta edad esté saltando de piedra en piedra", reprobó y que atribuyó a que "los señores de Madrid les cuesta trabajo entender la realidad gallega".

Al respecto, el director xeral de Recursos Mariños admitió que es "bajo" el actual coeficiente reductor para los percebeiros, del 0,10, ya que apuntó que los marineros mercantes lo tienen más elevado. No obstante, recordó que la reducción de la edad de jubilación es una competencia estatal. En cualquier caso, abogó por seguir por el "camino actual" que es el de "tratar de mejorar la situación".

PROPOSICION NO DE LEY.

Por su parte, Lobeira recordó que el BNG está preparando una propuesta para mejorar la seguridad de estos trabajadores y sus condiciones de vida. Hace un mes, el grupo nacionalista presentó una proposición no de ley para su debate en pleno para que se adoptasen medidas que mejoren las condiciones de trabajo, seguridad y jubilación de los percebeiros, al tiempo que adelantó una campaña social en todos los puertos para explicar esta iniciativa "necesaria" para "bajar la elevadísima tasa de siniestralidad".

Entre las "justas" medidas que se solicitan en esta proposición no de ley, Lobeira subrayó, en aquel entonces, el incremento de los coeficientes reductores para la edad de jubilación a un grado no inferior al 0,35, ya que explicó, a modo de ejemplo, de que la aplicación de un 0,30 a un trabajador con 20 años cotizados a la Seguridad Social supondría poder jubilarse a los 59 años de edad.

Lobeira también consideró necesario que se elabore un cuadro de dolencias profesionales de este sector y se establezcan líneas de ayudas para la adquisición de un equipo básico de protección individual. Además, exigió el incremento de la potencia propulsora máxima instalada en los motores de las embarcaciones que se dedican a la extracción del percebe, "con el fin de mejorar las condiciones de seguridad en el mar".

"El objetivo es que en Madrid entiendan por una vez por todas que los percebeiros existen y necesitan unas condiciones laborales y de jubilación en función de la singularidad de ejercer esta actividad en la costa gallega, que no es la mediterránea", concluyó cuando presentó la proposición.