Finaliza el juicio del crimen de es Carnatge: el jurado comienza la deliberación

El acusado, durante la primera sesión del juicio.
El acusado, durante la primera sesión del juicio. - EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 10 junio 2025 8:52

PALMA 9 Jun. (EUROPA PRESS) -

La fiscal mantiene la petición de 20 años de cárcel y destaca la labor "impecable" de los investigadores

La defensa reclama la absolución y rechaza que se dicte una condena basada "únicamente en sospechas"

PALMA, 9 (EUROPA PRESS)

El acusado del crimen de es Carnatge, que se enfrenta a 20 años de cárcel por presuntamente asesinar a un hombre y luego prender fuego a la chabola en la que vivía para ocultar el crimen, ha negado los hechos que se le imputan y ha asegurado este lunes que declaró "muy presionado" por la policía para que confesase y ha afirmado que se vio sometido "a una trampa".

En la sesión de este lunes del juicio con jurado en la Audiencia Provincial, el hombre ha añadido que la última vez que vio a la víctima, con quien mantenía una relación cordial y a quien visitaba de vez en cuando, fue unas semanas antes de los hechos y ha negado haber estado en la chabola durante la noche y madrugada del 25 de enero de 2022, cuando tuvieron lugar los hechos.

Respondiendo a las preguntas de su abogada, Marga Toro, el sospechoso, además, ha negado que el vehículo que aparece en las cámaras de seguridad sea el suyo.

Insistiendo en las presiones policiales durante su declaración, el hombre ha reiterado que no recuerda nada de lo que ocurrió aquella noche y que "dijera lo que dijera, las preguntas eran para que dijera que había estado allí y confesara algo que yo no había hecho". "Me decían que me iban a ayudar y como un imbécil me lo creí", ha añadido.

El acusado ha respondido, además de a las preguntas de su abogada, a una veintena de preguntas que le ha formulado el jurado, momento en que, entre otras cuestiones, ha negado haber tenido enfrentamientos violentos con la víctima y haber portado alguna vez, como dijo un testigo un cuchillo y un ladrillo.

INVESTIGACIÓN IMPECABLE

El juicio ha concluido este lunes con la práctica de la prueba de documental y la lectura de los informes finales de las partes. En este punto, la fiscal Adela Jiménez-Villarejo ha mantenido la petición de una condena a 20 años de prisión por asesinato al considerar que las pruebas practicadas acreditan y conducen al acusado, "aunque es verdad que no hay testigos".

La representante del Ministerio Público ha aprovechado para ensalzar la labor de la jueza instructora y de los investigadores, después de que en algunos momentos del juicio, la letrada de la defensa, Marga Toro, hubiera considerado como sesgadas las pesquisas. "He de romper una lanza a favor de la jueza instructora y de los investigadores. Su labor ha sido impecable", ha afirmado.

Entre sus argumentos, la fiscal ha destacado que la única personas con la que la víctima tenía problemas, siguiendo las declaraciones de los testigos, es la única cuyo teléfono se posiciona, gracias a las antenas, en el lugar y en el momento de los hechos.

"Él es la única persona que conoce a la víctima, que ha tenido episodios amenazantes, que ha tenido malas relaciones con él, que ha tenido violencia con él y que ha dormido ahí con él", ha señalado.

La acusación particular en nombre de la familia de la víctima, que ejerce el abogado Pedro Casado y que reclama 25 años de prisión por asesinato con alevosía y encubrimiento del cadáver, aunque no hay ninguna sentencia que contemple esta figura.

El letrado ha rechazado la argumentación del acusado de que había estado presionado en la declaración policial porque, ha explicado, en sede judicial el acusado se ratificó en su declaración ante la policía, cuando podía haber referido aquel supuesto episodio. "Nos ha intentado tomar el pelo", ha añadido.

"Su nombre y que la víctima era una buena persona son las únicas verdades que ha dicho", ha afirmado en relación a la declaración del acusado.

La abogada que defiende al acusado, Marga Toro, ha vuelto a reclamar el dictado de una sentencia absolutoria y ha insistido en considerar la investigación como sesgada.

Ha argumentado que en el atestado policial se omitió información como herramientas o un candelabro que se hallaron en el lugar del crimen y no se han tenido en cuenta las imágenes de cámaras de seguridad de una gasolinera cercana. En esta línea, ha insistido en que la investigación se basó únicamente en "cámaras y antenas".

"No hay ni una sola prueba directa. No se ha encontrado ningún objeto, ni llamadas ni mensajes. Sólo hay indicios y los indicios también tiene que probarse", ha argumentando, reclamando que no se dicte una sentencia condenatoria basándose únicamente en sospechas.

Para la letrada, dado que el acusado vivía por la zona, su presencia en el lugar no es categórica. "Era lo más habitual del mundo. Si hubiera vivido en Capdepera, pues sí, pero vívia por allí. Es como buscar huellas en tu propia casa", ha indicado.

Este martes está previsto que se entregue al jurado el objeto del veredicto, momento en que quedará incomunicado para deliberar la culpabilidad o inocencia del sospechoso.

LOS HECHOS

Los hechos se remontan a la madrugada del 25 de enero de 2022, momento en que se tuvo conocimiento de la muerte de un hombre en el interior de una chabola incendiada en es Carnatge (Palma).

Aunque inicialmente la muerte parecía haberse producido de forma accidental por la mala combustión de una estufa, tras confirmarse la muerte violenta la investigación culminó con la detención, en febrero de 2023, de un hombre de 32 años y origen español y que permanece desde entonces en prisión.

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