MENORCA 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Ciutadella, liderado por el socialista Llorenç Ferrer, ha acusado este jueves al PP de los actos violentos ocurridos este miércoles durante la celebración institucional del 9 de Julio, especialmente a la salida del Teatro des Born cuando unos manifestantes insultaron y lanzaron objetos contra miembros del Consistorio.
"Estos episodios de violencia no son fruto de una discrepancia legítima ni del desacuerdo con un proyecto urbanístico, sino que son la consecuencia directa de meses de desinformación, manipulación y agitación constante por parte del PP de Ciutadella, que ha alimentado el conflicto y la crispación social con mentiras, cifras infladas y acusaciones infundadas", han manifestado a través de un comunicado.
Desde el Consistorio han remarcado que "estas acciones violentas, que pusieron en riesgo la integridad física de representantes públicos y asistentes, no tienen cabida en una sociedad democrática ni pueden ser justificadas por ninguna discrepancia política".
Asimismo, han considerado que "desde el rechazo a la reordenación del transporte público hasta la campaña de recogida de firmas, con datos falseados y duplicaciones detectadas, el PP ha optado por bloquear y desacreditar uno de los proyectos más importantes, trabajados y necesarios para el futuro de Ciutadella: la conversión de la plaza des Born en un espacio para peatones".
"Es falso que este proceso se haya llevado a cabo con precipitación. Hace más de un año que se planifica con rigor y criterios técnicos. El proyecto incluye medidas de movilidad global, como la reubicación de la parada de autobuses, el refuerzo de los aparcamientos disuasorios y la mejora de la seguridad para residentes y visitantes", han indicado.
"En segundo lugar, se ha criticado que el aparcamiento no esté asfaltado y se ha querido utilizar la acumulación de polvo como arma política y hay que recordar que la normativa vigente impide asfaltar este terreno, una normativa redactada por el mismo PP que ahora la utiliza para desacreditar el proyecto", han matizado desde el Ayuntamiento, antes de matizar que "a pesar de estas limitaciones legales, trabajamos en buscar mejoras para este espacio"
Asimismo, han remarcado que no es cierto que no se hayan escuchado las voces de la ciudadanía. El Ayuntamiento ha afirmado que se ha reunido con todas las entidades y asociaciones que han querido participar, incluyendo la Asociación Hotelera de Menorca (Ashome), Caeb, el colectivo de mercados y comercios, transportistas, taxistas, representantes de las firmas contrarias al proyecto, el Consell Insular y las asociaciones de vecinos de Ciutadella Vella y Ciutadella Antiga. "La puerta siempre ha estado abierta al diálogo", han destacado.
Por otro lado, han afirmado que actualmente se está iniciando la segunda fase del proyecto, con la colaboración del Colegio Oficial de Arquitectos y un concurso de ideas abierto y participativo. "Una vez finalizada la temporada de verano, será el momento de analizar el funcionamiento con datos reales y valorar los resultados con rigor y transparencia", han recalcado.
El Consistorio ha recordado que Ciutadella ya ha vivido procesos similares de pacificación urbana en épocas anteriores, como la conversión del casco antiguo en zona peatonal, donde antes se podía circular e incluso aparcar en la plaza de la Catedral.
"Con el tiempo, los hechos han demostrado que estas transformaciones han sido beneficiosas, y hoy el centro histórico está más vivo que nunca, con residentes y visitantes que pasean, conviven y hacen sus compras", han apuntado.
"También en aquel momento hubo polémica, pero nunca se había llegado a los niveles de violencia vividos ayer miércoles", han lamentado y, en esta línea, han hecho un llamamiento "al diálogo, a la convivencia y a la responsabilidad compartida ante ante posibles quejas puntuales sobre una supuesta disminución de facturación en algunos comercios".
De este modo, han pedido "esperar a los próximos meses para poder hacer una valoración rigurosa y global de la temporada, con estudios técnicos y económicos, que permitan comparar datos objetivos y tomar decisiones fundamentadas". "No se puede permitir que el debate público se contamine con opiniones sesgadas, mentiras y desinformaciones promovidas por ciertos partidos políticos y medios de comunicación", han concluido.