IBIZA, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las demoras en las consultas médicas en el centro de salud Vila se han reducido cerca de un 20 por ciento durante un año.
La consellera de Salud, Manuela García, acompañada del director general del Servicio de Salud de Baleares (IbSalut), Javier Ureña, ha visitado los centros de salud Vila y es Viver con el objetivo de mantener encuentros con los profesionales de ambos centros y conocer de primera mano sus necesidades y sus propuestas.
El centro de salud Vila, concretamente, ha aumentado la actividad un uno por ciento en los dos primeros meses de 2024 respecto a hace un año. Hasta febrero, en el centro de la Avenida 8 de Agosto se han atendido 27.015 consultas médicas, de pediatría y de enfermería, frente a las 26.757 del mismo periodo de 2023.
El número de tarjetas sanitarias ha crecido en este centro un 0,7 por ciento y actualmente 25.338 tarjetas reciben asistencia frente a las 25.160 de hace doce meses.
Las demoras médicas se han reducido un 17 por ciento y han pasado de 2,84 días a 2,36 días; las demoras de pediatría han descendido más acusadamente, un 30,8 por ciento y han pasado de esperar 6,5 días hace un año a los 4,5 días actuales; las demoras de las consultas de enfermería son las que han experimentado una mayor mejora y se han reducido un 68,4 por ciento ya que en febrero de 2023 era de siete días y en febrero de 2024 la demora ha bajado hasta los 2,2 días.
Los cupos, es decir el número de tarjetas sanitarias por profesional, en Vila también se han visto "adecuados a las necesidades actuales" en el último año y todos ellos han descendido.
Concretamente, los contingentes de los médicos descendieron un 6,6 por ciento (de 1.881 tarjetas a 1.757), los de pediatría se disminuyeron un 4,15 por ciento (de 1.062 a 1.018) y los de enfermería un 35,9 por ciento (de 1.764 a 1.130).
NUEVO CENTRO DE ES VIVER
La consellera también ha visitado el Centro de Salud es Viver, en el que próximamente se empezará una ampliación, para conocer las necesidades de los profesionales de este centro.
Según ha informado Salud, el centro debe dar respuesta al importante incremento demográfico que se ha producido en la ciudad de Ibiza que hace necesaria la construcción de una nueva infraestructura sanitaria dimensionada correctamente. El incremento de la población asignada a este centro sanitario ha sido del 8,5 por ciento desde 2019 y, actualmente, da asistencia a 24.583 tarjetas sanitarias y en 2019 había asignadas 22.660 tarjetas.
La actuación contempla la demolición integral del actual centro de salud y la construcción del nuevo centro. El plan funcional contempla un espacio de 6.553 metros cuadrados (m2) con servicios asistenciales médicos y de enfermería y otras unidades de diagnóstico, tratamientos y de apoyo como, por ejemplo, la Unidad de Atención a la Mujer (UAM), de salud bucodental, de fisioterapia y rehabilitación o de salud mental. El presupuesto de ejecución máximo es de 12,9 millones de euros (sin IVA).
Está previsto que la Unidad de Atención a la Mujer cuente con algo más de 200 m2, mientras que la superficie del nuevo Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) será de 440 m2 y la Unidad de Patología Dual tendrá 350 m2. Las consultas de atención familiar y comunitaria dispondrán de 880 m2 y algo más de 500 m2 las de pediatría.
Además, la comitiva se ha desplazado al solar donde se planifica la construcción de la nueva Unidad Básica de Salud Puig d'en Valls. La futura Unidad Básica ocupará una superficie total de parcela de 1.140 m2, con una superficie construida interior de 411 m2 en una sola planta. Contará con seis consultas de 16 m2, una sala polivalente de 32 m2, además de tres almacenes y tres vestuarios.
En esta línea, el proyecto plantea dos entradas en el edificio. La principal, en el centro de la fachada norte del edificio, y la de acceso de personal, en la fachada oeste, vinculada a los usos menos públicos. En la entrada principal se plantea un espacio cubierto de unos 5 m2 de superficie para protegerse de la lluvia.
Todas las consultas, junto con la zona de espera, quedan agrupadas en un mismo conjunto dentro del edificio y se organizan en dos bloques de cuatro, todas ellas con vistas al exterior, iluminadas exclusivamente mediante huecos en fachada que garantizan la entrada de luz natural, renovación de aire natural y abertura al exterior.
La zona de cuidados y técnicas especiales y urgencias tiene acceso exterior propio cerca de la zona de maniobra de la ambulancia, y tiene una comunicación rápida por el interior con la recepción y el resto de las consultas. Por último, habrá un aparcamiento de cuatro plazas en la zona sur de la parcela, junto al muro del torrente.
La nueva Unidad Básica de Salud Puig d'en Valls, con una inversión de un poco más de un millón de euros, atenderá a las necesidades sanitarias de una población aproximada de 1.800 usuarios.
