La catedrática de Psicología Social de Género de la Universitat de les Illes Balears (UIB) Victoria Ferrer Pérez. - EUROPA PRESS
PALMA, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
La catedrática de Psicología Social de Género de la Universitat de les Illes Balears (UIB) Victoria Ferrer Pérez ha desmontado este viernes, durante las III Jornadas Salud y Mujer en el Hospital Universitario de Son Espases los "mitos" de las agresiones sexuales.
En declaraciones a los medios de comunicación, tras participar en las Jornadas, Ferrer ha señalado lo "devastador" que es sufrir una agresión sexual "no solo por los posibles efectos que esta tenga sobre la salud física, sino también en la psicológica, dado que puede llegar incluso, a veces, a ser motivo de suicidio".
Además, la catedrática ha explicado como una agresión sexual es posible que también repercuta en la "salud social" de las personas, "pudiendo llevar a la víctima a sufrir tanto problemas relaciones, como emocionales y sexuales". Y, ha alertado, de otro elemento de revictimización de la víctima, refiriéndose a como en ocasiones esta es puesta en cuestión y, o bien, culpabilizada por algo que esta "ni quiso ni busco". "Decirle a una víctima de agresión sexual frases como 'quizás si hubieras cogido otro camino...' o 'si no te hubieras expuesto...' es sin duda algo terriblemente dañino", ha incidido.
También hace "mucho daño", ha continuado Ferrer, acusar a una víctima de falsa denuncia dado que "esto significa poner en cuestión la realidad de estas".
"En el caso de violencias contra las mujeres suele haber siempre como un fondo de sospecha, porque lamentablemente negar la existencia de las agresiones, abusos o acosos forma parte de uno de los mitos más tremendos, el de negar su existencia misma", ha dicho.
Por tanto, ha apuntado, "en una agresión sexual hay que tener en cuenta dos vertientes diferentes, la salud física y psicológica y la salud social".
"QUE LA VIOLENCIA NO DEJA RASTRO PSICOLÓGICO ES UN MITO", AFIRMA
Ferrer, preguntada por la dificultad, en ocasiones, de demostrar el daño psicológico tras una agresión sexual, ha comentado que este es "otro mito".
"Pese a lo que se cree, el daño psicológico se puede demostrar, a través del psicólogo forense. Por tanto, decir que la violencia no deja rastro en lo psicológico, no es cierto, solo hace falta poder identificarlo y para ello se necesita formación", ha enfatizado.
EL PATRIARCADO, "EL ORIGEN DE LA VIOLENCIA"
Finalmente, la catedrática de Psicología Social de Género de la UIB ha asegurado que "el patriarcado es el origen de este tipo de violencias".
"A medida que las mujeres avanzan en independencia y libertades, en definitiva, en igualdad, y hay menos personas que apoyan determinadas conductas, las reacciones patriarcales son cada vez más virulentas. Por este motivo, hay que estar preparados para contrarrestarlo y neutralizarlo", ha concluido.