PALMA DE MALLORCA, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Salud y Consumo anunció hoy el inicio de una campaña dirigida a los profesionales con las directrices de prevención y tratamiento de las úlceras por presión, lesión cutánea que sufren diariamente unas 820 personas mayores de las islas.
La campaña consiste en el reparto al personal sanitario de pósters y material de bolsillo con un resumen de las medidas para prevenir y tratar la enfermedad. De esta manera, se han editado 2.000 carteles y 5.300 dípticos de bolsillo con las medidas de prevención y tratamiento, y 500 destinados a los gestores de centros sanitarios.
Precisamente, el tratamiento y la prevención de las úlceras por presión fue el eje principal de la I Jornada que tuvo lugar hoy en el Hospital Son Llàtzer que congregó a cerca de 300 profesionales y que fue clausurada por el conseller del ramo, Vicenç Thomàs.
Las islas disponen, desde 2007, de una guía clínica que será revisada el próximo año y, además, de un sistema de información para evaluar la prevalencia de las úlceras.
En este sentido, Thomàs señaló que la que se define como "epidemia bajo las sábanas o sumergida" incide en el 9 por ciento de los pacientes ingresados en los hospitales de corta estancia (una semana); en el 25 por ciento en los centros de media y larga estancia (hasta tres semanas); en el 17 por ciento de las unidades de asistidos de geriátricos y en el 13 por ciento de las personas inmovilizadas atendidas en sus domicilios.
PLATAFORMA DE DIFUSIÓN DE LAS ÚLCERAS POR PRESIÓN
Por otra parte, Baleares contará con una plataforma de difusión de la información científica de las úlceras por presión con el objetivo de informar y favorecer el intercambio de conocimientos y experiencias sobre la materia mediante la búsqueda permanente y la selección de información.
Estos conocimientos estarán avalados por los miembros del Grupo Asesor en Úlceras por Presión de las Baleares integrado por profesionales de la sanidad pública, concertada y de servicios sociales.
Según indicó el conseller, la atención de las úlceras por presión se contempla de una forma "humanística", considerando al paciente y a su familia como "protagonistas en un entorno que condiciona su capacidad de acceso a los recursos necesarios para la prevención y el tratamiento correctos".
Además, abogó por una nueva organización de los servicios de salud, basada en el tipo de curas que los pacientes necesitan y no exclusivamente en el proceso patológico que motiva el ingreso al hospital.