ERBIL 23 Jun. (Reuters/EP) -
El primer ministro de la región autónoma del Kurdistán, Nechirvan Barzani, ha revelado este lunes que advirtió hace meses a las autoridades iraquíes y estadounidenses de la amenaza que suponía la insurgencia suní, a pesar de lo cual permanecieron inactivas.
En una entrevista concedida a la cadena estadounidense NBC, Barzani ha asegurado que sabía desde hace meses del creciente peligro que representaba el Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), que ahora avanza rápidamente por territorio iraquí.
Los estadounidenses "nos dijeron que presionarían a Irak, pero no pasó nada", ha lamentado, explicando que, al darse cuenta de ello, intentó contactar con Al Maliki para hacer algo respecto al ISIS, en concreto, para asegurar Mosul.
"Le ofrecimos llevar a cabo una operación conjunta hace casi seis meses. Simplemente la rechazaron. Dijeron: 'Todo está bien, todo está bajo control, no hay ningún problema'", ha relatado el primer ministro kurdo.
Interrogado sobre la situación actual, Barzani ha coincidido con la comunidad internacional, en particular con el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, que está de visita en Irak, en la necesidad de formar un Gobierno inclusivo.
"Esta situación necesita una solución política. No hay una solución militar", ha afirmado, añadiendo que "tener a (Al Maliki) como primer ministro hará las cosas más complicadas".
Barzani ha apuntado como posible fórmula la creación de un Gobierno federal integrado por chiíes, suníes y kurdos de modo que cada comunidad controle efectivamente su territorio.