ESTAMBUL 7 Mar. (Reuters/EP) -
El conglomerado turco Boydak ha rechazado este lunes las acusaciones contra sus directivos detenidos por haber financiado supuestamente al clérigo turco afincado en Estados Unidos Fethulá Gulen, antiguo aliado del presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, y desde hace años crítico con sus políticas.
La Policía detuvo el viernes a Memduh Boydak, el director ejecutivo de la empresa, al presidente del grupo, Haci Boydak, y a otros dos miembros del consejo de dirección del consorcio. Memduh Boydak y Haci Boydak permanecen bajo custodia por decisión de un tribunal desde el domingo hasta que el caso esté preparado, ha informado la compañía. Los otros dos hombres fueron liberados.
Los dos directivos están detenidos acusados de financiar lo que la Fiscalía define como un "grupo terrorista gulenista", ha informado la agencia estatal de noticias Anatolia.
"Nuestro departamento jurídico está siguiendo el proceso relacionado con estas acusaciones a las que están expuestos los miembros de la junta y presentará las objeciones necesarias muy pronto", ha explicado la compañía en un comunicado.
"Creemos que el proceso judicial terminará pronto y que nuestro director ejecutivo, Memduh Boydak, y nuestro presidente, Haci Boydak, regresarán con nosotros y quedará claro que no tienen nada que ver con las acusaciones", ha añadido.
Su detención llegó horas antes de que las autoridades tomaran el control del periódico más importante del país, el diario 'Zaman', muy crítico con el Ejecutivo. La detención y la incautación del diario se produjo dos días antes de la celebración en Bruselas de la cumbre de líderes de la Unión Europea y Turquía para frenar la llegada de inmigrantes y refugiados al continente.
Las severas medidas impuestas contra 'Zaman' han recibido duras críticas desde Occidente. Estados Unidos ha denunciado lo ocurrido y ha pedido que se respete la libertad de prensa y el Ministerio de Exteriores francés ha calificado el acto de "inaceptable" y ha señalado que va en contra de los valores europeos.
Erdogan ha liderado la represión contra los seguidores de Gulen, su antiguo aliado, después de que en 2013 la Policía y la Fiscalía iniciasen una investigación por corrupción contra los simpatizantes del clérigo en el círculo más íntimo del presidente. Erdogan ha acusado a Gulen de intentar establecer un "estado paralelo" dentro de las instituciones estatales, el sistema judicial, la Policía, los medios de comunicación y la educación, para derrocarle.