Chipre.- Benedicto XVI insta a greco y turco-chipriotas a trabajar para superar la división de la isla

Actualizado: domingo, 6 junio 2010 22:27

MADRID, 6 Jun. (ACI/EP) -

El Papa Benedicto XVI cerró su primer viaje a Chipre con una ceremonia en el aeropuerto de Larnaca en la que defendió el trabajo por la paz y la reconciliación para superar la división, no sólo en la isla, sino en toda la región.

"Mientras dejo esta patria, como muchos otros peregrinos hicieron antes de mí, recuerdo nuevamente cómo el Mediterráneo está hecho de un rico mosaico de pueblos con sus culturas distintivas y su belleza, calidez y humanidad. Pese a esa realidad, al Mediterráneo este no le es ajeno el conflicto y el derramamiento de sangre, como trágicamente hemos visto en días recientes. Redoblemos nuestros esfuerzos para construir una paz real y duradera para todos los pueblos de la región", dijo el Papa.

Tras resaltar que Chipre puede jugar un rol importante en esta tarea, Benedicto XVI agradeció la bienvenida dispensada por los ortodoxos --que son mayoría en la isla-- y aseguró que "la Iglesia Católica, con la gracia del Señor, camina hacia la meta de la perfecta unidad en la caridad a través de un mayor aprecio de lo que los católicos y ortodoxos consideran como más querido".

"Permítanme también expresar mi sincera esperanza y oración para que, juntos, cristianos y musulmanes se conviertan en levadura para la paz y la reconciliación entre los chipriotas y sirvan como ejemplos para otros países", agregó.

"Finalmente señor presidente, permítame alentarlo a usted y vuestro gobierno en sus altas responsabilidades. Como bien sabe, entre sus importantes tareas está la de asegurar la paz y la seguridad de todos los chipriotas. Habiendo estado unas noches en la Nunciatura Apostólica, que está en la zona de distensión de Naciones Unidas, he visto por mí mismo algo de la triste división de la isla, y me he enterado de la pérdida de una parte significativa de la herencia cultural que pertenece a toda la humanidad", explicó.

El Papa relató luego que "he escuchado a los chipriotas del norte que desean volver en paz a sus hogares y lugares de culto, y me han conmovido profundamente sus ruegos. Seguramente la verdad y la reconciliación, junto con el respeto, son la más sólida base para el futuro unido y pacífico de esta isla, y para la estabilidad y prosperidad de toda su gente. Mucho bien se ha logrado respecto a esto a través del diálogo sustancioso en años recientes, pero todavía queda mucho por hacer para superar la división".

Por ello el Santo Padre alentó al presidente grecochipriota, Demetris Christofias, y "a vuestros compatriotas para trabajar paciente y firmemente con sus vecinos para construir un futuro mejor y más certero para todos vuestros hijos. Al hacerlo, cuente ciertamente con mis oraciones por la paz de toda Chipre".

"Señor presidente, queridos amigos, con estas palabras me despido. Muchas gracias y que el Dios Trino y la Virgen toda Santa los bendigan siempre. ¡Hasta luego! ¡Que la paz esté con vosotros!", concluyó.

Chipre está dividida en dos desde que el Ejército turco invadió el tercio norte de la isla en 1974 tras un golpe de Estado grecochipriota que pretendía la anexión de Chipre con Grecia.