Crónica UE.- Francia, Italia y Austria plantean fijar aranceles elevados a la importación de biomasa

Actualizado: lunes, 23 enero 2006 17:34

España reclama analizar el impacto en los mercados agrarios del uso de biocarburantes

BRUSELAS, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -

Francia, Italia y Austria encabezaron hoy la lista de países de la Unión Europea partidarios de establecer aranceles elevados a la importación de biomasa para disuadir la importación masiva de bioetanol, favorecer la producción europea y reducir la dependencia energética de la UE del exterior.

Esta posición, según informaron fuentes comunitarias, fue defendida igualmente por Bélgica, Lituania y Chipre durante la reunión del Consejo de Ministros de Agricultura que se reunió hoy en Bruselas para abordar, entre otros asuntos, el plan de acción de la biomasa presentado por la Comisión Europea el pasado diciembre.

Por su parte, la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, reclamó desarrollar de manera más amplia la utilización de los residuos ganaderos y de otros subproductos vegetales y animales como biomasa para la obtención de calor y energía eléctrica. Alemania, Francia y Suecia plantearon lo mismo.

Además, Espinosa destacó la necesidad de analizar el impacto del plan de la Comisión sobre los mercados de los productos agrarios, que son la base de obtención de los biocarburantes, sobre todo los cereales y las oleaginosas.

Los ministros analizaron hoy la iniciativa de la Comisión Europea para incrementar el uso de la energía procedente de la silvicultura, agricultura y desechos con la intención de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, proteger el empleo en las zonas rurales y limitar la dependencia europea del petróleo.

El llamado plan de acción de la biomasa ha cobrado un renovado protagonismo bajo la presidencia austriaca de la Unión Europea, debido a la reciente crisis del gas entre Rusia y Ucrania, que reveló la debilidad de la Unión Europea y su dependencia del exterior en materia energética.

En el marco de la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) de 2003, se establece una ayuda de 45 euros por hectárea, con un tupo de 1,5 millones de hectáreas a los agricultores que dediquen sus terrenos al bio-combustible. Algunos países, entre ellos Italia, Bélgica, Lituania o Chipre consideran esta cantidad insuficiente

El presidente en ejercicio del Consejo y ministro austriaco de Agricultura, Josef Pröll, que hoy presentó a sus colegas el plan de trabajo de la presidencia para el capítulo agrícola, aseguró que la biomasa tiene "futuro" en la Unión Europea.

También la comisaria de Agricultura y Desarrollo Rural, Marianne Fischer-Boel, consideró que la agricultura tienen una "magnífica oportunidad" de contribuir al fomento de las energías renovables y para mantener la actividad en actividades rurales.

En cuanto a la posibilidad de incrementar las ayudas actualmente fijadas en 45 euros por hectárea, la comisaria adelantó que, a finales de año, se hará una primera valoración del funcionamiento del plan para ver si conviene revisarlo.

Respecto a la propuesta de fijar fuertes tarifas a la importación de bioetanol, Fischer Boel dejó claro que la Comisión Europea "no tiene la intención de construir una Europa-ciudadela cerrada a la producción de fuentes de energía renovable". "Se trata --dijo--de tener una situación equilibrada. Queremos producir nosotros, pero también podemos importar", apuntó.

CONFERENCIA EN VIENA

También subrayó que el uso de Organismos Genéticamente Modificados (OGM's) en la producción de agricultura biológica "no es aceptable" y recordó que el Reglamento de la Comisión sitúa en el 0,9% el umbral máximo de presencia de OGM's en este tipo de productos.

Este tema será debatido de manera monográfica en una conferencia que la presidencia austriaca tiene previsto celebrar en abril en Viena, según anunció el ministro austriaco, quien adelantó que la Presidencia impulsará un estudio científico sobre un asunto "delicado" para la opinión pública europea.