El enviado especial de la ONU para Yemen finaliza una ronda de contactos en Riad para la paz en el país

MADRID, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -

El enviado especial de Naciones Unidas para Yemen, Hans Grundberg, ha concluido un viaje de dos días a Arabia Saudí en el que se ha citado con distintos altos cargos en el marco de las recientes conversaciones de paz para poner fin al conflicto tras casi una década de guerra civil en el país.

Grundberg se ha reunido con el presidente del Consejo Presidencial de Liderazgo de Yemen, la nueva autoridad derivada del Gobierno reconocido del país, Rashad Al Alimi, así como con el primer ministro yemení, Maeen Abdulmalik, y el ministro de Exteriores, Ahmed bin Mubarak, según un comunicado remitido por su oficina.

En todos sus encuentros, ha enfatizado "las prioridades inmediatas" que tiene el país, fundamentalmente las humanitarias, y ha insistido en el lanzamiento de un "proceso político" que permita "lograr una paz duradera" bajo los auspicios de Naciones Unidas.

Grundberg también se ha citado con el embajador de Arabia Saudí en Yemen, Mohamed al Jaber, con el que ha convenido "mejorar la cooperación entre las partes", tanto regionales como internacionales, de cara a una "solución política" en el país.

Al Jaber y Grundberg han discutido las iniciativas políticas, económicas y de desarrollo para apoyar tanto al Gobierno como al pueblo yemení a la par que han reconocido los esfuerzos dentro del mecanismo de la ONU para "alcanzar una solución política integral" al conflicto, ha recogido este jueves la agencia de noticias SPA.

Las conversaciones de paz en Yemen se han visto impulsadas por el acuerdo alcanzado en marzo entre Arabia Saudí e Irán para normalizar sus relaciones diplomáticas, rotas en 2016, gracias a la mediación de China. Riad y Teherán han apoyado a partes enfrentadas en el marco del conflicto que estalló en 2015 en el país asiático, que comparte frontera con Arabia Saudí.

La guerra en Yemen ha terminado por hundir al que era uno de los países más pobres del mundo en la peor catástrofe humanitaria en la actualidad, según Naciones Unidas. Más de 21 millones de yemeníes (dos terceras partes de la población) necesitarán ayuda humanitaria este año y de ellos 17 millones deberán recibirla con carácter urgente para sobrevivir.