SÍDNEY, 29 Nov. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Australia ha propuesto este jueves permitir a sus espías que se encuentran en el extranjero a usar la fuerza letal contra cualquiera que ponga en peligro una operación de inteligencia, dando a la agencia de espionaje más autonomía en misiones en el extranjero.
Actualmente la ley australiana permite a los agentes que se encuentran en el extranjero utilizar la fuerza letal en defensa propio, para proteger las vidas de otros agentes o a aquellos que trabajan para el Gobierno.
"Los cambios significarían que los agentes serían capaces de proteger a una gama más amplia de personas y utilizar una fuerza razonable si alguien representa un riesgo para una operación", ha afirmado la ministra de Asuntos Exteriores, Marise Payne.
Por ejemplo, la ley enmendada permitiría a los agentes del Servicio de Inteligencia Secreta Australiana (ASIS, según sus siglas en inglés) utilizar la fuerza letal para proteger a individuos, como los rehenes, durante misiones en el extranjero, según Payne.
La enmienda presentada este jueves en el Parlamento es necesaria debido al aumento de los peligros a los que se enfrentan los agentes de ASIS, según ha señalado Payne.
"Nuestros oficiales de ASIS a menudo trabajan en lugares peligrosos, incluso en condiciones de guerra, para proteger a Australia y nuestros intereses", ha recalcado la ministra.
Australia, un firme aliado de Estados Unidos que envió tropas a Afganistán e Irak, ha estado en alerta máxima por los ataques de milicianos tanto en su país como en sus embajadas en el extranjero.
Una fuente del Gobierno ha indicado que los agentes australianos que operan bajo la nueva ley tendrían poderes similares a los de los agentes de Inteligencia que trabajan para otras agencias de espionaje occidentales.
La enmienda requiere el apoyo del parlamento de Australia, donde el Gobierno no tiene mayoría.
