EL CAIRO, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior egipcio, Mohamed Ibrahim, ha acusado al movimiento islamista Hermanos Musulmanes de intentar provocar una revolución precisamente coincidiendo con el cuarto aniversario del levantamiento popular que acabó con el mandato del presidente Hosni Mubarak en 2011.
Ibrahim ha destacado que "sin la decisiva intervención de la Policía", el país "estaría en una situación completamente distinta", según recoge el diario estatal egipcio 'Al Ahram' en su edición digital.
Durante las protestas y disturbios del domingo fueron detenidas 516 personas, miembros de Hermanos Musulmanes, según Ibrahim, que ha confirmado 23 muertos, incluidos dos reclutas de la Policía, y 97 heridos.
Los disturbios se concentraron en el bario de Matariya, en El Cairo, donde hubo individuos que se subieron a los tejados y abrieron fuego indiscriminadamente, ha asegurado Ibrahim.
Así, ha asegurado que los resultados de las autopsias de los fallecidos, que serán publicados el jueves, demostrarán que la Policía no tuvo nada que ver.
Además, Ibrahim ha denunciado intentos de asaltar comisarías. "La era de asaltar prisiones y comisarías forma parte del pasado y no volverá", ha apostillado.
Entre los fallecidos está la activista Shaimaa el Sabagh, dirigente del Partido Alianza Popular Socialista en Alejandría, ha confirmado el ministro. El Sabagh fue abatida el sábado de un disparo cuando se manifestaba pacíficamente en la emblemática plaza Tahrir de El Cairo.
Desde el partido de la activista denuncian un asesinato premeditado, pero Ibrahim ha asegurado que si se demuestra que hay personal del Ministerio del Interior implicados, él mismo lo entregará a las autoridades para que sea juzgado. Además, ha destacado que la Policía solo emplea gases lacrimógenos contra manifestantes pacíficos.
