MADRID, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
Al menos 80 soldados birmanos han resultado muertos o heridos como consecuencia de los enfrentamientos registrados esta semana contra los rebeldes del Ejército para la Independencia Kachin (EIK), según informaron los propios separatistas, quienes han admitido que el Ejército se apoderó el pasado miércoles de una de sus principales bases en el norte del país.
La base, localizada en la localidad de Mong Tong --estado de Shan-- es un punto estratégico que se encuentra en la ruta del gasoducto transbirmano.
El portavoz del ala política del EIK, la Organización para la Independencia Kachin, informó de que el Ejército se había hecho finalmente con el control de la base a pesar de que informes desde el frente constatan al menos 80 soldados birmanos muertos o heridos, y dos miembros del EIK gravemente heridos.
El Ejército birmano no se ha pronunciado sobre la operación militar ni ha confirmado el balance proporcionado por el grupo separatista.
Según el relato del portavoz kachin, la llegada de nuevos refuerzos permitió a las tropas birmanas hacerse con el control de la base tras lanzar un ataque con morteros y lanzacohetes contra las instalaciones, según explicó el portavoz La Nan al diario 'Irrawaddy News'.
"El Gobierno estaba empeñado en hacer presión para hacerse con el control de esta base porque se encuentra en la misma ruta que atraviesan los gasoductos y los oleoductos. Creo que para ellos es de una importancia vital", manifestó el portavoz kachin.
De momento y según el grupo, las fuerzas del EIK que han escapado de la base se encuentran atrincheradas en escondites cercanos y planean retomar las instalaciones. "La lucha proseguirá", declaró el portavoz. "Regresaremos a las tácticas de guerrilla".
Sin embargo, a pesar de estas nuevas hostilidades, el brazo político del EIK ha asegurado que se reunirá con una delegación del Gobierno para entablar negociaciones de paz y poner fin a un conflicto que ha obligado a desplazarse a 45.000 civiles desde su reinicio el pasado mes de junio.
