BAGDAD 16 Mar. (Reuters/EP) -
El Ejército iraquí ha confirmado que la ofensiva para recuperar el control de Tikrit, en manos del grupo terrorista Estado Islámico, se ha estancado y ha pedido más ataques aéreos para poder poner fin al control de los yihadistas.
"Hemos decidido poner fin a las operaciones militares en Salahuddin --provincia de la que Tikrit es capital-- con el fin de reducir las bajas entre nuestras heroicas fuerzas y preservar las infraestructuras pendientes", ha explicado el ministro del Interior, Mohamed al Ghabanen, en una conferencia de prensa en la ciudad de Samarra, a 95 kilómetros al norte de Bagdad.
Con el uso de tácticas de guerra de guerrillas, los milicianos han convertido la ciudad en un laberinto de bombas de fabricación casera y edificios trampa con explosivos escondidos. Además, están utilizando francotiradores para frenar el avance del Ejército iraquí.
Aunque el Ejército ha conseguido recuperar grandes zonas de la ciudad de Tikrit, los distritos centrales todavía siguen bajo la influencia de Estado Islámico.
Solo cuatro días después de que las fuerzas de seguridad iraquíes y milicias chiíes consiguieran tomar parte de la ciudad, la ofensiva, que se ha convertido en una de las más grandes desplegadas contra los yihadistas desde junio de 2014, se ha estancado esperando nuevas ayudas y refuerzos.
Según ha explicado un militar desplegado en Tikrit, a lo largo de este lunes no se han producido combates y están a la espera de que lleguen nuevos ataques aéreos para poder luchar contra Estado Islámico. "Necesitamos el apoyo aéreo de cualquier fuerza que pueda trabajar con nosotros", ha pedido el viceministro de Defensa, Ibrahim al Lami, aunque no ha querido especificar si este llamamiento va dirigido a la coalición liderada por Estados Unidos o a Irán.
Más de 20.000 tropas y milicias chiíes respaldadas por Irán están participando en la operación que comenzó hace dos semanas. Junto a ellos están luchando un pequeños grupo de combatientes suníes desde Tikrit y la provincia de Salahuddin.