BRUSELAS, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha asegurado este martes que no se van a "suavizar" los criterios para levantar la exigencia de visado a los turistas turcos, pese a que el fin de esta política de aquí a junio es parte del acuerdo que la Unión Europea ha cerrado con Ankara a cambio de que Turquía frene el paso de refugiados a suelo comunitario.
"Estamos trabajando en la liberalización de los visados para los ciudadanos turcos, Turquía debe ahora cumplir todas las condiciones pendientes para que la Comisión pueda adoptar su proposición en los próximos meses", ha explicado Juncker en una intervención ante el pleno del Consejo de Europa en Estrasburgo (Francia).
"Las condiciones no se van a suavizar en el caso de Turquía", ha asegurado, en respuesta a quienes temen que la UE sea menos exigente de lo establecido, para contentar a Ankara y afianzar su colaboración en materia migratoria.
El jefe del Ejecutivo comunitario ha defendido los términos del acuerdo, que incluye un pacto para deportar a Turquía a todos los inmigrantes, incluidos demandantes de asilo, que lleguen a Grecia de manera irregular.
Juncker ha recalcado que cada expediente se está tratando de manera individual en suelo heleno antes de decidir la expulsión y ha insistido en que ello supone una garantía de que se cumplen tanto la legislación europea y el Derecho Internacional.
Además ha asegurado que el programa UE-Turquía para contener el flujo migratorio está dando frutos y que las cifras de inmigrantes que cruzan el mar Egeo de Turquía hacia Grecia han registrado una "fuerte disminución".
Bruselas ha defendido el pacto con Turquía como un elemento esencial para combatir las mafias que trafican con personas y evitar que miles de refugiados sigan llegando a la UE sin el permiso de los Estados miembros.
Por otro lado, Juncker ha aprovechado su intervención ante el Consejo de Europa para defender los valores comunes que unen a ambas instituciones y ha proclamado el "no al racismo y no a rechazar al otro".
"No a los ataques estúpidos contra el Islam, que forma parte de los paisajes europeos", ha enfatizado, para después pedir "no tener miedo de los refugiados", porque "quienes vienen de lejos nos aportan su talento, su energía y su sabiduría, todo aquello que necesitamos en la Europa del siglo XXI".
