MADRID, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Organización de Cooperaicón Islámica (OCI) ha condenado este lunes las declaraciones del ministro de Patrimonio israelí, el ultraderechista y ultraortodoxo Amihai Eliyahu, quien ha asegurado este domingo que podría ser "una opción" lanzar una "bomba nuclear" sobre la Franja de Gaza.
"La organización considera que este discurso constituye una extensión de la ideología terrorista extremista, lo que exige que la comunidad internacional lo condene y tome medidas efectivas para detener la agresión militar, las masacres diarias y el genocidio que comete la ocupación israelí contra el pueblo palestino", reza un comunicado de la OCI.
Además, han calificado las declaraciones de "racistas" y que reflejan "un discurso extremista y de odio, incitación a la violencia, terrorismo organizado y el crimen de genocidio".
Por su parte, la oficina del primer ministro israelí se ha desmarcado de estas declaraciones, y el ministro de Seguridad Nacional de Israel, el ultraderechista Itamar Ben Gvir, ha asegurado este domingo en la citada red social que ha hablado con Eliyahu, quien le ha asegurado que "sus palabras fueron dichas como una metáfora".
El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, ha tildado las palabras del ministro de "infundadas e irresponsables". "Es bueno que estas no sean las personas a cargo de la seguridad de Israel", ha dicho.
De la misma forma, Benny Gantz, que forma parte del gobierno de emergencia creado para la toma de decisiones militares en Gaza, ha aseverado que sus palabras "dañan los valores de Israel" y "aumentan el dolor de las familias de los secuestrados".
El líder de la oposición israelí Yair Lapid ha pedido la dimisión de Eliyahu, afirmando que con sus palabras "ha perjudicado a las familias de los secuestrados", así como "a la sociedad civil" y al "estatus internacional" de Israel.
Poco después, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha anunciado que ha suspendido a Eliyahu de "forma indefinida" de las próximas reuniones ministeriales, si bien por el momento permanece en el puesto, ha recogido el diario 'The Times of Israel'.