El Parlamento de Irak aprueba el nombramiento de Talabani como presidente

Actualizado: domingo, 23 abril 2006 2:05


BAGDAD, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Parlamento iraquí designó ayer -a propuesta del recién elegido presidente iraquí, Jalal Talabani,- al chií Jawad al Maliki como nuevo primer ministro, poniendo así en marcha un proceso político destinado a cerrar las heridas abiertas tras los últimos enfrentamientos entre las comunidades chiíes y suníes y continuar la lucha contra la insurgencia y la violencia sectaria.

La medida pone fin a meses de estancamiento político ente chiíes, suníes y kurdos que amenazaba con arrastrar la nación hacia una guerra civil en gran escala. Al Maliki tiene a partir de ahora 30 días para someter su gabinete a la aprobación del Parlamento.

La cámara eligió asimismo al presidente kurdo Jalal Talabani para llevar a cabo un segundo mandato consecutivo y designó como presidente del Parlamento al árabe suní Mahmud al Mashhadani. Este tendrá como subordinados al chií Jalid al Attiyah y al kurdo Aref Tayfour.

La primera medida adoptada por talabani tras su reelección fue la designación de al Maliki, candidato del bloque dominante chií, como primer ministro. Al-Maliki había sido propuesto por los chiíes el viernes después que el primer ministro saliente Ibrahim al Jaafari abandonase su intento por continuar en un nuevo mandato.

El intento de Al Jaafari por mantenerse en el cargo había suscitado una intensa oposición por parte de suníes y kurdos y causó un estancamiento durante varios meses en la vida política del país tras las elecciones de diciembre, que se vio agudizada por el empeoramiento de la situación de seguridad en el país.

Funcionarios estadounidenses e iraquíes esperan que un Gobierno de unidad nacional que represente a chiíes, suníes y kurdos pueda sofocar tanto la insurgencia de los suníes como los cruentos actos de violencia entre suníes y chiíes que se han sucedido durante el período de incertidumbre política. De lograrlo, podría permitir a Estados Unidos comenzar la retirada de sus 133.000 soldados.

El portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan, señaló ayer que el Gobierno de George W. Bush confía en que los nuevos acontecimientos políticos en Irak conduzcan a un progreso significativo para formar un gobierno permanente. "Esperamos ver avances en los próximos días", dijo McClellan a los periodistas desde California.

NUEVA JORNADA DE VIOLENCIA

Por otro lado, dos artefactos explosivos estallaron ayer por la mañana en un mercado público del norte de Irak provocando la muerte de dos personas y heridas a unas 17, informaron fuentes policiales. La primera bomba explotó a las 7:30 horas (hora local), en el medio de un mercado de Muqdadiya, una localidad situada 90 kilómetros al norte de Bagdad, y provocó un importante incendio, señaló desde el anonimato un policía de la provincia de Diyala.

Cuando llegaron equipos de bomberos hizo explosión el segundo artefacto, matando a un bombero y a un civil, y dejando heridas a otras 17 personas, agregó el agente.

Por otra parte, en Kut, 160 kilómetros al sureste de la capital, la Policía encontró un cadáver flotando sobre el río Tigris. La víctima mostraba signos de tortura, incluyendo daños graves en la cabeza, explicó un empleado del Centro Forense de Kut, Hadi al Ittabi.

Asimismo, en el este de Bagdad, una bomba colocada en una calle estalló al paso de una patrulla iraquí, cerca del puente Al Mahstal, a las 9:15 horas, dejando heridos a dos policías, señaló el teniente de la Policía Bilal Ali.

La Policía iraquí informó hoy por otro lado, del descubrimiento de los cuerpos sin vida de diez personas con aparentes signos de tortura y de haber muerto en cautividad en distintos puntos de Irak.

Según la Policía, en los alrededores de Bagdad aparecieron ayer los cadáveres de diez iraquíes con el cuerpo plagado de impactos de bala. Muchas de las víctimas aparecían con los ojos tapados por sus propias manos y las piernas atadas con cuerdas. Algunos parecían haber sido torturados, y uno de ellos había sido decapitado, agregaron las fuentes.

Este tipo de asesinato han sido muy recientes últimamente en Irak.

Con frecuencia, las fuerzas de seguridad no pueden precisar si las víctimas son fruto de la insurgencia, de enfrentamientos sectarios entre chiíes y suníes, o de actividades criminales.