PRAGA, 2 May. (Reuters/EP) -
El partido gobernante en República Checa, ANO, prevé cerrar en cuestión de días el acuerdo para conformar una nueva coalición con los socialdemócratas, lo que pondría fin a medio año de incertidumbre política, después de que las elecciones de octubre de 2017 no dibujasen una mayoría parlamentaria clara.
ANO logró la victoria en dichos comicios, pero la falta de una mayoría suficiente le obligó a negociar con otros partidos. En enero intentó sacar adelante un gobierno en minoría, pero el resto de formaciones se negaron a darle su confianza e incluso algunos reclamaron la salida de Andrej Babis, salpicado por acusaciones de corrupción.
"Deberíamos poder afinar el acuerdo de coalición antes de que concluya la semana, para poder incluir las demandas de los socialdemócratas", ha afirmado este miércoles el 'número dos' de ANO, Jaroslav Faltynek, en declaraciones al periódico 'Pravo'.
El nuevo escenario pasa por un Gobierno en minoría de centristas y socialdemócratas, apoyado en el Parlamento también por los comunistas. Los socialdemócratas, al igual que ANO, también prevén llegar pronto a un acuerdo, si bien en su caso someterán el pacto a la votación de la militancia, previsiblemente este mismo mes.
Entre los requisitos planteados al partido de Babis para incorporarse a esta nueva alianza figuran reformas fiscales y un compromiso para que el primer ministro dimita en caso de ser declarado culpable de las investigaciones en curso por el presunto desvío de fondos europeos. También reclama que se aparte a la ultraderecha de los puestos parlamentarios que ostenta.
