MADRID, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Policía Militar de Israel ha anunciado este jueves que investigará el caso de Ibrahim Abu Thuraya, un palestino de 29 años con las dos piernas amputadas que murió por los disparos de las fuerzas de seguridad en la frontera con la Franja de Gaza en medio de las protestas por la decisión de Estados Unidos de reconocer Jerusalén como capital israelí.
Thuraya, que perdió las dos piernas en un bombardeo efectuado por Israel sobre el enclave palestino en 2008, murió el pasado 15 de diciembre tras recibir un disparo de los soldados israelíes cuando estaba a 20 metros de la valla que separa ambos territorios.
Naciones Unidas consideró que la muerte de Thuraya es "incomprensible" porque "no hay nada que pudiera sugerir que suponía una inminente amenaza de muerte o de graves daños" para las fuerzas de seguridad, "dada su severa discapacidad, que debía ser claramente visible".
Pese a los llamamientos de la ONU y ONG para investigar el caso, el Ejército zanjó el asunto con una diligencia preliminar según la cual "no se usó fuego real" contra Thuraya, sino solo contra "instigadores" concretos, por lo que "es imposible" determinar si murió por los disparos israelíes o por la acción de los propios manifestantes. "No hubo un fallo moral o profesional" por parte de los soldados hebreos, afirmó.
Sin embargo, la Policía Militar ha explicado este jueves que ha recibido información procedente de organizaciones que trabajan en la Franja de Gaza que le permite reanudar la investigación sobre la muerte de Thuraya, según informa el diario local 'Jerusalem Post'.
El coordinador de las actividades del Gobierno de Israel en los territorios palestinos, el general Yoav Mordechai, ha pedido en Facebook al Comité Internacional de Cruz Roja (CICR) que publique las conclusiones de su propia investigación. Hamás ha respondido en Twitter diciendo que no permitirá que el CICR se implique en el caso.
Al menos 15 palestinos han muerto en los enfrentamientos que se han producido entre manifestantes y fuerzas israelíes en la Franja de Gaza y Cisjordania desde el pasado 6 de diciembre, cuando Donald Trump dio el paso de reconocer Jerusalén como capital israelí.
