MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, ha pedido este martes al primer ministro de Armenia, Nikol Pashinian, y al presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, que "cumplan sus compromisos" para poner fin a los combates en Nagorno Karabaj, después de se hayan registrado incidentes violentos pese al teórico alto el fuego mediado por Estados Unidos.
Las dos partes se han acusado mutuamente de violar este alto el fuego, el tercero que se intenta en la zona tras un mes de ataques cruzados en Nagorno Karabaj, un territorio de mayoría armenia que se autoproclamó independiente de Azerbaiyán.
Pompeo ha mantenido sendas conversaciones telefónicas con Pashinian y Aliyev para instarles a "cumplir sus compromisos con el cese de hostilidades y perseguir una solución diplomática" con la mediación del Grupo de Minsk --Estados Unidos, Rusia y Francia-- de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
En este sentido, el jefe de la diplomacia norteamericana ha subrayado que "no hay solución militar al conflicto", según un comunicado difundido por el Departamento de Estado.
Por su parte, Hikmet Hajiyev, asesor de la Presidencia azerí, ha denunciado durante la jornada la muerte de cuatro civiles, incluida una niña de dos años, por el impacto de un misil disparado por las fuerzas armenias contra una localidad de la región de Barda.
Hajiyev ha acusado a Ereván del uso de armas de racimo y ha agregado que el ataque ha dejado además trece heridos. "Los ataques indiscriminados contra civiles continúan", ha lamentado en una serie de mensajes publicados en su cuenta en la red social Twitter.
"En violación del alto el fuego humanitario y para compensar sus pérdidas militares, Armenia recurre a crímenes de guerra matando a civiles", ha sostenido. "El Ministerio de Defensa de Armenia ha dicho que golpearán con dureza. Con ello se refieren a civiles, niños y mujeres", ha remachado.
Sin embargo, la portavoz del Ministerio de Defensa armenio, Sushan Stepanian, ha rechazado las acusaciones sobre un ataque en Barda, que ha descrito como "una mentira total" y "una sucia provocación", tal y como ha recogido la agencia armenia de noticias Armenpress.
Pashinian ha dado además un discurso a la nación en el que ha acusado a "fuerzas turcas, azeríes y terroristas" de "lanzar una guerra contra Arstaj --el nombre oficial de la república 'de facto' en Nagorno Karabaj-- y los armenios". Asimismo, ha acusado a "unidades especiales" de Pakistán de estar implicadas en los combates.
"Hace un mes tenían planes de destruir y hacer que Arstaj se arrodillara rápidamente, pero hoy Arstaj permanece en pie, si bien herido. Esto se debe ante todo a nuestro heroico Ejército, nuestro heroico pueblo. Este proceso cruel pero heroico nos da confianza. Arstaj permanecerá porque nuestro espíritu es irrompible y nuestra voluntad es inamovible", ha dicho.
En este sentido, ha manifestado que la población azerí "nunca recibirá la noticia" de su victoria y ha reiterado que "el pueblo de Arstaj, el pueblo armenio y todos los armenios lucharán de forma incansable, desde cada árbol, cada piedra y cada milímetro".
LA PROPUESTA DE IRÁN
Rusia ejerció como mediador de los dos primeros acuerdos fallidos para frenar los combates, el 10 y el 17 de octubre, y tras la intervención de Estados Unidos es ahora Irán el país que ha planteado la posibilidad de ejercer de mediador con una nueva iniciativa de paz.
El viceministro de Exteriores iraní, Abbas Araqchi, expondrá dicho plan a autoridades armenias y azeríes, así como a representantes de Rusia y de Turquía, durante una gira por los cuatro países, ha explicado un portavoz del Ministerio citado por la agencia de noticias Tasnim.
"La seguridad de las regiones fronterizas es muy importante para la República Islámica de Irán y es una línea roja", ha dicho Araqchi, advirtiendo de las posibles repercusiones del conflicto para los suministros de agua y electricidad.
Los ministros de Exteriores de Rusia y Turquía, Sergei Lavrov y Mevlut Cavusoglu, respectivamente, también han hablado del conflicto de Nagorno Karabaj en una conversación telefónica mantenida este martes, según fuentes diplomáticas rusas citadas por la agencia de noticias Sputnik.
Las dos naciones se acusan mutuamente de haber desatado esta nueva espiral de hostilidades, que estallaron el 27 de septiembre. Además, los dos bandos reconocen que la escalada ha dejado decenas de muertos y centenares de heridos, entre ellos civiles, pero sostienen que las bajas y las pérdidas de material bélico del lado enemigo son mucho más elevadas.
El territorio forma parte oficialmente de Azerbaiyán pero tiene mayoría de población armenia y está bajo dominio armenio desde el final de la última guerra, en la que las fuerzas armenias se hicieron con el control además de varios distritos azeríes colindantes.