KINSHASA, 13 Nov. (Reuters/EP) -
Miembros del Consejo de Seguridad de la ONU ha pedido a República Democrática del Congo que se culmine pacíficamente la transición de poder tras las elecciones presidenciales que han sido aplazadas hasta abril de 2018 pese a que el mandato del presidente Joseph Kabila concluye el 19 de diciembre.
Diplomáticos de los países miembros del Consejo han realizado este fin de semana una visita que busca evitar brotes de violencia, ya que Kabila ha anunciado su intención de permanecer en el cargo más allá de esa fecha debido a que la elaboración del censo se ha retrasado.
En concreto, Kabila ha apuntado que se mantendrá hasta que se realice la votación, mientras la oposición le acusa de manipular el proceso para aferrarse al poder, que alcanzó en 2001, cuando fue asesinado su padre. Más de 50 personas murieron en las protestas que estallaron en septiembre ante el aplazamiento de las elecciones.
Durante su visita, los representantes del Consejo de Seguridad han señalado que modificar la Constitución para habilitar a Kabila para un tercer mandato no sería la solución. "La RDC está en un momento clave de su historia", ha apuntado el embajador francés, François Delattre, en declaraciones a la prensa. "Por primera vez es posible una transición pacífica de poder al final del mandato del presidente", ha añadido.
El embajador angoleño, Ismael Abraao, ha apuntado la necesidad de lograr una solución pacífica. "Tenemos garantías. Todos quieren evitar lo peor (...). El Consejo de Seguridad está dispuesto a trabajar con ustedes para que haya paz", ha destacado. Sin embargo, ha añadido que "no se plantea un tercer mandato como solución a la crisis". "La solución está en el diálogo permanente", ha argumentado.
Uno de los senadores afines a Kabila, Leonard She Okitundu, ha restado importancia al posible tercer mandato de Kabila. "No cabe duda sobre un tercer mandato porque la Constitución lo prohíbe. No puede haber un tercer mandato", ha apostillado.
Mientras, crece la incertidumbre por la desaparición el sábado del líder de la antigua guerrilla del M-23, Sultani Makenga, del campamento de desmovilizados de Uganda donde estaba. El domingo, el Ejército ugandés aseguró que Makenga estaba en Kampala, la capital del país.
