MOSCÚ, 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
El cohete ruso modelo "Proton-M", que iba a poner en órbita un satélite de comunicaciones japonés, y que fue lanzado anoche desde el cosmódromo Baikonur, sufrió una avería e impactó sobre territorio kazajo aunque sin provocar ningún daño, según informaron las fuentes de la Agencia Espacial Rusa (Roskosmos).
"Según los datos preliminares, no se separó la segunda etapa del vehículo impulsor", precisaron las fuentes que atribuyeron la avería a los fallos en el funcionamiento de la unidad de propulsión, según explicaron, citadas por la agencia de noticias rusa, RIA Novosti.
El cohete "Proton-M" que llevaba el satélite japonés JCSAT-11 fue lanzado desde el centro espacial Baikonur a las 02:43 de hoy, hora de Moscú. "La avería se registró 135 segundos después de haber sido accionados los propulsores de la segunda etapa del cohete" y se apartó de la trayectoria prevista cuando se encontraba a una altitud de 74 kilómetros, según indicó el portavoz de Roskosmos, Alexander Vorobyov.
Vorobyov informó de que varias partes del cohete cayeron sobre una zona desierta a unos 50 kilómetros al sureste de la ciudad de Zhezkazgan, en Kazajstán. Gracias a un acuerdo entre ambos países, el lanzamiento de cohetes desde Baikonur han sido suspendidos hasta que se aclare la causa del accidente.
El portavoz indicó que es poco probable que este incidente afecte a las futuras operaciones de la base pero uno de los trabajadores del Centro de Investigación y Producción del Estado de Khrunichev, controlado por el Gobierno y encargado de la fabricación de los cohetes, indicó que dependerá de cuánto se tarde en presentar el informe la comisión encargada de la investigación.
El portavoz de Khrunichev, Alexander Bobrenyov, comentó que, después de lo ocurrido el año pasado con otro tipo de cohete, el informe tarda unas seis semanas en realizarse y el lanzamiento de cohetes Proton están previstos para noviembre y diciembre. En julio 2006, un cohete Dnepr que llevaba 18 satélites de varios clientes se estrelló poco después de su lanzamiento desde Baikonur vertiendo una gran cantidad de combustible tóxico en una zona deshabitada de Kazajstán.
