MOSCÚ 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
Al menos 800 personas han sido detenidas este miércoles y alrededor de 30 han resultado heridas en una nueva jornada de disturbios en Moscú, donde las fuerzas de seguridad trataron de impedir enfrentamientos raciales, según informó la Policía.
Alrededor de 3.000 antidisturbios se desplegaron en la plaza Europa después de que se temiese un posible enfrentamiento entre ultranacionalistas e inmigrantes del Cáucaso Norte. Muchos de los detenidos portaban pistolas eléctricas o cuchillos.
La Policía intentó dispersar a la multitud --de unas 1.500 personas--, aunque algunos grupos que corearon lemas nacionalistas intentaron bloquear una calle cercana, informó la agencia de noticias rusa RIA Novosti.
Las autoridades rusas quieren evitar disturbios como los registrados el pasado sábado, los peores en más de una década. Alrededor de 5.000 nacionalistas y aficionados al fútbol radicales se enfrentaron con la Policía cerca de la plaza Roja y atacaron a caucasianos.
El origen de estos enfrentamientos radica en la muerte de un seguidor del Spartak de Moscú en una pelea con personas procedentes del Cáucaso Norte.