Colombo reitera su compromiso con el alto el fuego e insta a los rebeldes al diálogo para lograr una solución al conflicto
COLOMBO, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Sri Lanka respondió hoy al informe presentado ayer por los rebeldes Tigres de Liberación de la Tierra Tamil (LTTE) sobre las muertes presuntamente causadas por las fuerzas de seguridad ceilandesas, acusando hoy a los rebeldes tamiles de la muerte de 42 civiles y 63 miembros de las fuerzas de seguridad desde el 24 de febrero pasado, tras la ronda de conversaciones entre ambas partes en Ginebra.
En una declaración de la secretaría que coordina el proceso de paz del Gobierno, Colombo considera que el informe del LTTE es "un ejercicio de cinismo de lo peor y no está basado en hechos". Según las estadísticas del Gobierno, desde el 24 de febrero y hasta el 27 de abril, "un total de 42 civiles fueron abatidos por el LTTE, la mayoría de ellos tamiles".
"Además, un total de 18 miembros de la Marina, 31 del Ejército, tres de la Fueza Aérea, cuatro policías, siete guardias locales, fueron abatidos por el LTTE en sus cobardes ataques con minas antipersona y granadas en zonas ampliamente pobladas por civiles", añade el Gobierno, prometiendo que presentará "un informe detallado lo antes posible".
Ayer, la división política del LTTE acusó al Ejército de Sri Lanka de la muerte de 103 civiles de etnia tamil desde las conversaciones en Ginebra el pasado mes de febrero, en muchos de los casos con el apoyo de los "paramilitares", nombre utilizado por el LTTE para referirse a los combatientes del comandante Kaduna, que se separó del grupo principal de los Tigres en 2004. Entre los fallecidos, según los datos de los rebeldes, había quince mujeres y seis menores de edad.
En su comunicado de hoy, Colombo subraya que las cifras de "secuestros, alistamiento obligatorio de niños y asesinatos de políticos tamiles que disentían así como asesinatos terroristas de civiles por parte del LTTE han sido ampliamente documentadas y diseminadas por organizaciones humanitarias y de Derechos Humanos, incluidas UNICEF, el relator especial de la ONU para los crímenes extrajudiciales, Amnistía Internacional y Human Rights Watch".
Asimismo considera que con el informe, en el que "acusa a los civiles tamiles de sus cobardes ataques con minas contra las fuerzas de seguridad", "expone la naturaleza del LTTE al poner a los civiles en una situación tan vulnerable y peligrosa (...) utilizándoles como escudos humanos". Lo que es peor, añade el Gobierno, "el LTTE con este complot ha estigmatizado al pacífico pueblo tamil como 'terrorista', una etiqueta que se aplica sólo al LTTE".
Pese a todo, Colombo reitera su "pleno compromiso con el acuerdo de alto el fuego así como con los acuerdos alcanzados en las conversaciones de Ginebra en febrero y lo aplicará lo mejor que pueda, sin contar con la fuente de violencia". En este sentido, indicó que algunos de las muertes denunciadas ayer por el LTTE están siendo investigadas por la Policía, entre ellas la muerte de varios civiles en la región de Trincomalee por los bombardeos de las fuerzas de seguridad el martes y el miércoles en represalia por el atentado suicida contra el jefe del Ejército.
"El LTTE debería también reconocer que el ciclo de violencia que está dejando un alto balance de civiles --cingaleses, tamiles y musulmanes-- no puede evitarse con un intercambio de acusaciones y cargos, sino a través del diálogo y un compromiso sincero para encontrar una solución negociada al conflicto y al derramamiento de sangre que genera", concluye el Ejecutivo en su mensaje.
