La Receta Electrónica está "totalmente" implantada en El Hierro, La Palma, La Gomera y Fuerteventura, según Roldós

Actualizado: jueves, 2 abril 2009 21:20

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Sanidad, a través de la Dirección General de Farmacia del Servicio Canario de la Salud (SCS), ha culminado con éxito la total implantación de la Receta Electrónica Canaria (REC) en las islas de El Hierro, La Palma, La Gomera y Fuerteventura. Así lo anunció hoy la Consejera de Sanidad, Mercedes Roldós, en la inauguración de las Jornadas Nacionales de Receta Electrónica organizadas por el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Santa Cruz de Tenerife.

La REC consiste en la emisión al paciente de un documento único que contiene todo el tratamiento prescrito pendiente de dispensar hasta la próxima revisión médica --con un máximo de 90 días--, que engloba todas las prescripciones necesarias hasta ese momento, según informó la Consejería en un comunicado.

Este plan de tratamiento, junto con la tarjeta sanitaria individual, es imprescindible para que le sea dispensada la medicación en las oficinas de farmacia. Dicho plan terapéutico lleva un código de barras por cada bloque a dispensar en los 90 días. Además, contiene la fecha de próxima revisión, el ciclo de entrega y cada cuanto tiempo debe recoger el medicamento. Asimismo, cada paciente en su plan de tratamiento le aparecerá la fecha de inicio y finalización del mismo, coincidiendo esta última con la próxima revisión del facultativo.

Con la implantación de la REC en las zonas básicas de salud se ha prescrito una amplia variedad de medicamentos, especialidades, efectos y accesorios, de productos financiados y medicamentos por principio activo o por bien por su nombre comercial.

La REC permite la impresión de un único plan de tratamiento que engloba toda la medicación necesaria para un periodo de tiempo, evitando la impresión de múltiples recetas de papel, con lo que se posibilita que el médico pueda dedicar más tiempo a la atención de sus pacientes. Se produce además una mejora al evitarse errores a la hora de las dispensaciones por parte de los farmacéuticos y permite reducir la medicación innecesaria en los domicilios de los pacientes y, por ende, la automedicación.

CÓDIGO DE BARRAS

Este plan de tratamiento posee un código de barras de seguridad que junto con la tarjeta constituye el acceso para que la oficina de farmacia pueda acceder a su dispensación. Cada plan de tratamiento se compone de un conjunto de bloques de recetas, estando la farmacia autorizada a dispensar sólo la medicación correspondiente al bloque vigente.

El plan contenido para el paciente es firmado digitalmente lo cual acredita fehacientemente su realización y autoría; se trata de un documento reimprimible por la unidad administrativa del centro ante un extravío, rotura o pérdida sin necesitar el acceso a la consulta.

Cuando la farmacia accede a ese plan puede también consultar la información que el médico le transmite al farmacéutico y le da a este último la posibilidad de enviar información en sentido inverso, hacia la historia del paciente como un comentario para el médico prescriptor.

El modelo de Receta Electrónica comenzó como experiencia piloto en la isla de La Palma. A partir de esos resultados, la Consejería de Sanidad firmó un convenio de colaboración con los Colegios de Farmacéuticos que fijó las acciones a llevar a cabo a través de una infraestructura tecnológica, que incluye líneas de comunicación entre las Oficinas de Farmacia, los Colegios Farmacéuticos y el Servicio Canario de la Salud, además de módulos de prescripción asistida, dispensación electrónica y Firma Electrónica.

Con su implantación en Canarias, la Consejería de Sanidad pretende, por tanto, aumentar la eficacia y operatividad de la asistencia sanitaria, así como aprovechar las sinergias que pueda generar este modelo en aspectos como las alertas sanitarias, farmacias centinelas, pacientes polimedicamentados mayores de 75 años o trazabilidad de medicamentos y productos sanitarios, asegurando la participación y colaboración de los Colegios de Farmacéuticos y las propias Oficinas de Farmacia.