Sólo 6 sugerencias intentan evitar que se prohíba fumar y beber en las playas de Arona (Tenerife)

Actualizado: jueves, 4 junio 2009 20:07

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -

Tras una prórroga de 20 días, el borrador de la Ordenanza de Playas y el Litoral de Arona (Tenerife) ha recibido sólo 6 sugerencias, tres de ellas de ciudadanos y otras tantas de organizaciones empresariales, turísticas y comerciales. Todas coinciden en autorizar que se fume y beba en la playa y que para los 'monumentos' de arena se pida licencia dependiendo del tamaño al igual que sucede con la presencia de perros.

Así lo ha explicado a Europa Press, el concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento sureño, Antonio Sosa, señalando que con la ordenanza se ha tratado de buscar soluciones para la limpieza y el cuidado de las playas abriendo el debate a la ciudadanía.

Sosa, que opinó que se había "malinterpretado" el documento, saliendo a unos días de aprobarse inicialmente en el pleno municipal que se sancionaría a quienes fumaran o bebieran en la playa, así como a quienes construyeran figuras de arena de grandes dimensiones, con las que muchos hacen negocio --tal y como han constatado en la playa de Las Vistas algunos usuarios-- aseguró que ya en el primer periodo de exposición, en donde se había prestado el personaje, sólo los populares habían presentado alguna observación al documento.

En esta ocasión, el círculo de Empresarios y Profesionales del Sur de Tenerife (CEST), los comerciantes de Arona y el Centro de Iniciativas Turísticas del Sur (CIT) han abogado por que se deje fumar y han opinado, según el concejal nacionalista, que este tipo de prohibiciones sólo dañaría al turismo y los sectores económicos del entorno. Los perros y las obras de arena se permitirán o no dependiendo del tamaño.

El documento, tras incluir las sugerencias, se llevará a pleno donde recibirá la aprobación inicial y volverá a salir a exposición pública en donde la ciudadanía podrá presentar las alegaciones a esta ordenanza. Sosa ha insistido en la necesidad de abrir un debate para dar soluciones, más allá de las campañas de limpieza, para los problemas que generan colillas, botellines y perros. "Tenemos que ser los usuarios de las playas los que la cuidemos, no podemos tener a una persona de limpieza detrás de cada uno para que se mantenga limpia la playa", concluyó.